CISMA estudia los paisajes de la piedra seca de Navas de San Juan

El grupo de estudio tiene un recorrido de 40 años de investigación en este tipo de construcciones en peligro de extinción

 CISMA estudia los paisajes de la piedra seca de Navas de San Juan

Foto: EXTRA JAÉN

Una de las construcciones objeto de estudio en Navas de San Juan

Las construcciones en piedra seca encuentran su origen –dicen- al menos en el Neolítico. Son espacios que se levantan a partir de piedras, generalmente del entorno, de carácter calizo en su mayor parte y muy consistentes, apoyadas unas sobre otras sin otro material que las una.
Un grupo de estudiosos en la materia lleva más de 40 años trabajando e investigando este tipo de construcción, actualmente en peligro de extinción por falta de uso, encontrándose muchas de ellas derruidas y derrumbadas por el abandono. El Colectivo de Investigación de Sierra Mágina (CISMA), compuesto por Jorge González Cano, Juan Antonio López Cordero y Francisco Jiménez Rabasco, dedica sus anchos conocimientos de historia y etnografía al estudio de la piedra seca desde un punto de vista holístico.


Un equipo interdisciplinar del Colectivo de Investigación de Sierra Mágina formado por Jorge González Cano, Juan Antonio López Cordero y Francisco Jiménez Rabasco, dedica sus anchos conocimientos de historia y etnografía al estudio de la piedra seca desde un punto de vista holístico. Para ello, están contando con la colaboración de Francisco Miguel Merino laguna, gran conocedor de estos restos materiales en el municipio.



Este equipo, tras realizar un profundo trabajo de investigación en el municipio de Sorihuela del vGuadalimar (Jaén), su actual objeto de estudio se encuentra en Navas de San Juan, donde estas construcciones son también consecuencia de su economía agroganadera tradicional, con una clara funcionalidad, que utiliza como material rocas carbonatadas ricas en bases con calizas, dolomías y margas en su mayor parte. El Colectivo nos explica que son materiales de origen sedimentario datados en el Triásico -las más antiguas- y en el Jurásico y Cretácico -la mayoría-, que se depositaron en medios marinos a diferentes profundidades. Consciente del potencial de este legado, la Unión Europea financia la investigación mediante fondos FEADER gestionados por ASODECO, a solicitud del Ayuntamiento de Navas de San Juan, permitiendo así el trabajo exhaustivo del colectivo.

El equipo considera que esta arquitectura tradicional constituye “una importante expresión cultural del Condado, producto de la actividad de sus gentes, especialmente agro-ganadera, y de las condiciones climáticas y geográficas de la misma”. CISMA asegura que la técnica de la piedra seca permitió la conquista del medio, garantizando la supervivencia humana, e incluso supuso una transformación del territorio acorde con la naturaleza, favoreciendo la biodiversidad con intervenciones a pequeña escala.

Se trata de una compleja actividad que conlleva el conocimiento experto del entorno y sus características, en el que se aprovechan los recursos existentes más cercanos, y que ya en 2018 logró inscribir los “Conocimientos y técnicas del arte de construir muros en piedra seca” en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.

Tras identificar los diferentes elementos etnográficos en piedra seca en Navas de San Juan, el equipo de trabajo pasará a realizar un diagnóstico de su estado de conservación y realizar las recomendaciones pertinentes para favorecer el uso y disfrute de estos bienes como recurso educativo y turístico salvaguardando su gran valor.