La Policía frustra una estafa online por valor de 15.000 euros en Jaén
La víctima estaba operando en la banca online desde su domicilio cuando le apareció una ventana emergente indicándole que tenía que actualizar el sistema
Foto: EXTRA JAÉN
La investigación se ha llevado a cabo desde la Comisaría de la Policía Nacional en Jaén.
La Policía Nacional de Jaén ha logrado frustrar una estafa online por valor de 15.000 euros y ha identificado a dos hombres como presuntos autores de un delito de estafa con la técnica del 'smishing' y otro de blanqueo de capitales.
En este tipo de estafa los ciberdelincuentes buscan la manera de influir en la persona que está al otro lado del dispositivo electrónico utilizando normalmente las emociones para que la víctima le entregue sin darse cuenta la llave de acceso a su información.
En este caso, la víctima se encontraba operando en la banca online desde su domicilio cuando le apareció una ventana emergente, al parecer su banco, indicándole que tenía que actualizar el sistema o se produciría un bloqueo en su ordenador. Tras realizar la actualización requerida, esta se percató de dos transferencias realizadas desde su cuenta sin su consentimiento ni autorización por valor de 15.000 euros.
Gracias a la rápida intervención policial, los agentes consiguieron que las cuentas de destino fueran bloqueadas de forma preventiva sin que los autores del delito consiguieran disponer del dinero, que fue recuperado por su dueño.
La investigación tuvo su origen tras la interposición de una denuncia en la Comisaría Provincial de Jaén donde la víctima relató que cuando se encontraba operando desde el ordenador personal de sobremesa en su vivienda realizando una transferencia desde su cuenta bancaria, en mitad del proceso apareció un cuadro de diálogo, aparentemente de su entidad bancaria, en el que le indicaba que tenía que actualizar el sistema de seguridad o en caso contrario, se produciría un bloqueo del ratón y teclado.
La víctima, no sospechando nada extraño, esperó a que dicha actualización se llevara a cabo, reiniciándose el ordenador cuando terminó la supuesta actualización. La sorpresa fue cuando el denunciante accedió de nuevo a su entidad, observando cómo se habían realizado dos transferencias bancarias sin su consentimiento ni autorización por valor de 15.000 euros.
Los agentes averiguaron que una de las transferencias tenía como destino una cuenta en España y la otra, en cambio, había sido enviada a un banco en Bélgica. Además, lograron identificar a los titulares de ambas cuentas. El siguiente paso fue bloquear ambas cuentas de forma preventiva, evitando de esta forma que los presuntos autores de la estafa consiguieran disponer del dinero.
La víctima remitió a los agentes una carta manuscrita reconociendo la labor desarrollada y agradeciendo el trabajo realizado.