Las lluvias dan un respiro al olivar pero ya de cara a la próxima campaña

Las organizaciones agrarias han incidido en que es necesario que se mantengan ya que el estrés hídrico del olivar requiere abundancia de precipitaciones

 Las lluvias dan un respiro al olivar pero ya de cara a la próxima campaña

Foto: EXTRA JAÉN

Imagen de archivo

Organizaciones agrarias como Asaja, UPA y COAG han coincidido en ver un respiro para el olivar con las lluvias caídas en la provincia de Jaén, pero han incidido en que es necesario que se mantengan ya que el estrés hídrico del olivar requiere de mayor abundancia de precipitaciones para por lo menos garantizar una próxima campaña normalizada en el olivar de regadío.

El gerente de Asaja Jaén y portavoz de la organización, Luis Carlos Valero, ha indicado a Europa Press que la lluvia "está viniendo extraordinariamente" porque se venía "arrastrando un déficit de agua de otoño muy importante y con estas lluvias puede ser que lleguemos a unos niveles normales de unos 200 litros" y así afrontar unas "perspectivas halagüeñas".

Valero ha apuntado también que "ya han comenzado a funcionar las escorrentías, la tierra está saturada de agua y mucha de este agua comenzará a ir a los pantanos y a los ríos", algo que contribuirá a mejorar la situación en los embalses de la cuenca del Guadalquivir de cara a los futuros riegos.



Por su parte, el secretario general de UPA Jaén, Cristóbal Cano, ha dicho a Europa Press que las lluvias son "muy bienvenidas" porque es necesario que "revierta" la situación de sequía. "Ojalá este sucesivo paso de borrascas sea ese punto de inflexión que estamos deseando para que de cara ya a la próxima campaña 23/24 podamos albergar esperanzas de que sea una campaña como mínimo media", ha dicho Cano.

Ha añadido que para la presente campaña la incidencia de la lluvia "no es significativa" y se da "por perdida", pero las miras ya están puestas en la próxima campaña que podría estar "en jaque" si ahora no hay abundancia de precipitaciones.

"Necesitamos que las precipitaciones sean abundantes para que se recuperen las plantaciones y para que alberguemos esperanzas de una campaña de regadío sin problemas porque el nivel de agua embalsada en la cuenca del Guadalquivir no alcanza el 20 por ciento y tiene que llover mucho para que esos recursos se recuperen y tengamos una campaña normal de regadío", ha afirmado el máximo responsable de UPA en la provincia de Jaén.

Desde COAG, su secretario general, Juan Luis Ávila, ha destacado a Europa Press que las lluvias caídas en la provincia "todavía no son significativas" y que habría que alcanzar una media de unos 100 litros por metro cuadrado para afrontar "la posibilidad de cosecha el año que viene, pero sobre todo en el regadío" porque en secano el olivar "ha llegado a principios de diciembre con un estrés hídrico tremendo".

En la cosecha actual, la incidencia de la lluvia es nula y "lo único que va a permitir es que la aceituna gane algo de calibre y se pueda recoger aunque eso va a ser a costa de reducir el rendimiento graso de la aceituna".

La producción de aceite de oliva en Andalucía para la campaña 2022-2023 será de 587.000 toneladas, lo que supone un descenso del 49,1 por ciento respecto a la producción final de la anterior y del 47,5 por ciento que la media de las cinco últimas campañas, según el aforo de cosecha elaborado por la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural.

Esta situación, generalizada en todas provincias, se agrava en la de Jaén, principal productora mundial, donde el aforo prevé una producción de 200.000 toneladas de aceite de oliva. Implica una bajada del 60 por ciento con respecto a la anterior campaña y del 59,8 por ciento frente a la media de las cinco últimas.