El ansia de ganar se convierte en un obstáculo para el Jaén Rugby

Los jiennenses perdieron ante el Zarautz RT 24 a 5

 El ansia de ganar se convierte en un obstáculo para el Jaén Rugby

Foto: Pedro Cruz

Partido entre el Zarautz RT y el Jaén Rugby.

Quizás sea pronto para pensarlo con la derrota tan en los huesos, pero el tiempo les recordará como aquellos jugadores que en la temporada 2022/23 jugaron una fase de ascenso. Poco consuelo para una plantilla, como la de Jaén Rugby, a la que le puede las ansias de ganar. Una ambición que se convirtió en obstáculo para conseguir un mejor resultado: Zarautz RT 24 - Jaén Rugby 5

Los jiennenses llevaron la iniciativa en los primeros minutos. Ganaron la primera melé y las primeras touches, pero los locales les impidieron con una gran presión salir de su campo jugando a la mano. Los zarautztarras sumaron sus tres primeros puntos en el minuto 6 y los segundos en el 12. Dos golpes de castigo por fuera de juego pateados desde 30 metros.



Jaén Rugby no tuvo el mismo acierto ni aprovechando las indisciplinas de los locales ni encadenando fases a la mano ni pateando a la espalda de la segunda cortina defensiva. En el minuto 18, la cuesta se empinó aún más. Los jiennenses se vieron sorprendidos en una melé a favor dentro de su veintidós y los locales sumaron un ensayo transformado.

Los esfuerzos de los jiennenses por llevar el juego a campo contrario morían antes de llegar a la veintidós contraria. Demasiados errores de mano, demasiadas patadas a sus espaldas, demasiados saques laterales perdidos. Antes del descanso, Gabri López – que había salido mientras cerraban una brecha a Luis Alberto Enrique- recortó distancias con un ensayo muy trabajado. Sus compañeros habían intentado entrar bajo palos chocando contra la delantera local, pero acabaron llevando el oval junto al banderín para que el canterano lo posara dibujando un escorzo casi imposible. Cinco puntos. Muy poco premio para tanto esfuerzo.



Tras el descanso, el 13-5 duró poco en el marcador. El apertura de Zarautz RT sumó tres nuevos puntos con otro lejano puntapié, esta vez con el viento en contra. Jaén Rugby necesitaba ese acierto del que han hecho gala sus pateadores durante la temporada, pero ni Tato Camacho ni Carlos Castro atinaron en sus lanzamientos a palos. Los cambios dieron aire por unos instantes a los –esta vez-de blanco, aire que no bastaba para salir de la veintidós rival con más puntos en el marcador.

Ese toma y daca mantuvo el juego lejos de zonas peligrosas. El tiempo pasaba sin que Jaén Rugby consiguiera enlazar fases. El balón acababa en el suelo o la jugada con un golpe en contra. Pero nunca dejaron de intentarlo. Ni siquiera cuando los locales lograron su segundo ensayo a cinco minutos del final del partido dejando el marcador en el 24-5 final.





Segunda jornada del Grupo Élite, segunda derrota. Duele. Quizás con el tiempo a estos jóvenes jugadores – Robbi, Manu, Guille, Pablo, Gabri, Franco- alguien les dirá lo que significa disputar una fase de ascenso con menos de veinte años. Quizás se lo hagan ver, César, Santiago, Tato o Nandi, que lo están haciendo por primera vez con más de treinta. O Ulises Fernando, Agustín, Joaquín, Penni, Aaron, Facu, Carlos o Luis Alberto que están viviendo el momento con la misma intensidad.

Puede que tampoco consuele en caliente a los aficionados, pero seguro que renovarán la ilusión por ver a Jaén Rugby ganar cuando todos ellos, su equipo, salten al césped de Las Lagunillas. Y eso será el domingo que viene.