La Plataforma Ciudadana en Defensa de la Universidad de Jaén (UJA) está combatiendo como soldados ucranianos desde el 24 de marzo de este año 2022 contra la Consejería de Universidades de la Junta de Andalucía, con el objetivo de obtener una financiación digna y justa para nuestra Universidad, así como para proteger su expansión natural respondiendo a las demandas de la sociedad jiennense.
El primer éxito de la Plataforma ha consistido en hacer fracasar en toda Andalucía el intento del ya exconsejero de Universidades de la Junta de Andalucía, Rogelio Velasco, de imponer a la UJA un modelo de financiación 2022-2026 que, seleccionando criterios que se sacaba de su manga arbitraria, no le reconocía sus méritos y, al contrario, la penalizaba aplicándole un recorte salvaje de más de 8 millones de euros anuales en el presupuesto que le corresponde como Universidad Pública. Modelo, que de haberse aplicado, hubiera reducido la UJA –al final de esos cinco años– a un 40 % de su dimensión actual, y en el siguiente quinquenio a un 40 % del 40 % anterior, aminorándola hasta convertirla en algo insignificante: con pérdida de la importante labor de investigación y de la función social que ahora realiza, limitándola a una academia docente generalista de unas cuantas carreras y poco más, y obligando a los jiennenses a emigrar a otras tierras para acceder a una educación superior.
Afortunadamente, el exconsejero Rogelio Velasco, una persona extremadamente soberbia, un iluminado, ya se encuentra descansando en su casa, después de la derrota que ha sufrido en Jaén y que ha constituido su muerte política. El Rector de la UJA no podía con él, era como un muro cerrado, encabezonado en tumbar a nuestra Universidad y en quebrar a nuestra tierra. Sin embargo, la Plataforma Ciudadana en Defensa de la UJA consiguió, con el respaldo de los jiennenses, que se le cayera el bolígrafo de la mano con el que iba a firmar la muerte de la Universidad de Jaén. Lo derrotamos las gentes de la provincia de Jaén, las familias de Jaén y en las calles de Jaén, y en primera línea del frente la Plataforma Ciudadana en Defensa de la UJA. Ganamos la batalla principal el 7 de abril de 2022, y con ella la guerra contra Velasco. Ha sido una gran victoria al servicio de la UJA y de la provincia de Jaén. El estrepitoso fracaso del exconsejero Velasco en su intento de derribar a Universidades jóvenes andaluzas como la UJA, lo lleva hoy sellado en su frente y para los restos. No ha sido la Universidad de Jaén quien ha quedado en la insignificancia, sino el exconsejero.
A Rogelio Velasco, jamás se le perdonará en esta tierra que, para tratar de tumbar a nuestra Universidad, cuando ya se veía muy presionado por la opinión pública jiennense –incluidos todos los partidos políticos de Jaén–, se inventara un coctel de estadísticas falsas contra los méritos objetivos de la institución universitaria jiennense y la tratara de denigrar en el Parlamento andaluz, siendo la UJA una institución pública que pertenece al organigrama de la Junta, a la que debiera por tal –en su labor– defender en vez de tratar de hundir. Ofensas contra la UJA y, por consiguiente, contra la provincia y contra los jiennenses, que el rector Juan Gómez Ortega denunció magníficamente bien ante los medios de comunicación.
Algún día podré contar, dado que ya forma parte de la historia de la provincia de Jaén, qué ocurrió aquella tarde-noche del 6 al 7 de abril de 2022, cuando tras levantar el teléfono el Presidente de la Junta de Andalucía Juanma Moreno, consciente de que habían sido vencidos, comunicó al Consejero iluminado que arreglara esta injusticia contra Jaén y su Universidad ante un Jaén levantado e indignado, debiendo pasar su injusto y discriminatorio recorte salvaje contra la UJA a estado de “pausa” (que luego sería definitiva). Solicitándole, además, que convocara rápidamente on line a los Rectores andaluces para consensuar en esa tarde, a la mayor brevedad, un documento (que nadie firmó, pacto entre caballeros lo denominan) en el que la Junta se comprometía a revisar el plan de financiación desde cero y sin límites, todo ello con el fin de conseguir neutralizar de la manera que fuera las movilizaciones sociales que estaba llevando a cabo la Plataforma Ciudadana en Defensa de la UJA en la vanguardia de la sociedad jiennense.
Por lo que representa la Universidad de Jaén para nuestra tierra, quién ataca a la UJA, ataca a Jaén (y provincia) y a los jiennenses. El nuevo Consejero de Universidades de la Junta de Andalucía, José Carlos Gómez Villamandos debe ser consciente que los jiennenses pararemos en las calles, igual que lo hicimos con su antecesor Velasco, cualquier modelo de financiación para la Universidad de Jaén que sea discriminatorio. Jaén fue un avispero para Velasco. Me consta que el Rector de la UJA lo avisó en la Consejería (“no sabéis dónde os metéis”) cuando pretendieron imponer a los jiennenses –a sangre y fuego– la práctica desaparición de nuestra Universidad. Y, efectivamente, resultó su fracaso político. El nuevo Consejero de Universidades, que –según me dicen– aspira a ser el próximo Ministro de Universidades en un hipotético Gobierno Feijóo, avisado está.