Úbeda concede la medalla de la ciudad a Diego Martínez

El Ayuntamiento entrega este reconocimiento, a título póstumo, a quien fuera presidente de la Asociación de ‘Amigos de la Música’

 La viuda de Diego Martínez recoge la medalla de la ciudad de Úbeda

Foto: Ayuntamiento de Úbeda

La viuda de Diego Martínez recoge la medalla de la ciudad de Úbeda

El Ayuntamiento entrega este reconocimiento, a título póstumo, a quien fuera presidente de la Asociación de ‘Amigos de la Música’, además de impulsor del Festival de Música y Danza.

El Auditorio del Hospital de Santiago acogía anoche el acto institucional de entrega de la Medalla de Oro de la Ciudad de Úbeda a Diego Martínez Martínez, a título póstumo, justo cuando se cumple un año de su muerte.

En palabras de la alcaldesa de Úbeda, “su partida ha dejado un gran dolor y vacío en el corazón de todos aquellos que lo tratamos. Él nunca antepuso sus intereses personales, siempre pensó en el bien común y en lograr uno de sus principales objetivos: El desarrollo cultural de Úbeda”.



Toni Olivares ha subrayado que el Ayuntamiento estaba en la “obligación moral de llevar a cabo este acto público de reconocimiento a uno de los mejores gestores culturales de los que ha gozado esta ciudad, ya que con su labor ha contribuido a que Úbeda sea actualmente considerada como la Capital Cultural de la provincia, y que su agenda cultural sea un referente nacional e internacionalmente”.

En este sentido, destacó que esta medalla es la distinción más alta que la administración local puede conceder, “entregada únicamente a las personas o colectivos que han destacado por su buen hacer, por su conducta ejemplar o por su trayectoria en favor de nuestra localidad”.

Uno de los momentos más emotivos que se vivieron fue la proyección del audiovisual, de la Asociación Amigos de la Música, centrado en la figura del homenajeado y que recordaba a los presentes momentos muy entrañables de él.

La hija mayor de Diego Martínez, María Luisa Martínez, ha destacado el inmenso cariño que su padre le tenía a esta ciudad, además de la labor de “embajador que realizó en muchas ocasiones con grandes artistas, a quienes transmitía de una manera cercana ese mismo amor, con el único objetivo que su estancia en Úbeda fuera un recuerdo inolvidable”.