COAG considera fundamental un plan estratégico en torno al Guadalquivir

e trataría de un gran acuerdo de futuro, por encima del Plan Hidrológico, que priorice el uso del agua para una mayor eficacia

 COAG considera fundamental un plan estratégico en torno al Guadalquivir

Foto: EXTRA JAÉN

Jornada sobre recursos hídricos

El secretario general de COAG Jaén, Juan Luis Ávila, ha considerado este viernes fundamental que el Gobierno de España y la Junta de Andalucía hagan un Plan Estratégico para el Guadalquivir, "columna vertebral" de la comunidad autónoma. Se trataría de un gran acuerdo de futuro, por encima del Plan Hidrológico, que priorice el uso del agua para una mayor eficacia social, económica y ambiental, según ha explicado el también responsable de olivar de la organización agraria en Andalucía.

Así lo ha indicado en la jornada 'El agua como fuente de la vida y como base de la agroalimentación: tendencias y retos para optimizar los recursos hídricos'. En esta cita, organizada con motivo del Día Internacional del Agua por la Cátedra COAG-CREA de Derecho Agroalimentario y del Dominio Público Hidráulico de la Universidad de Jaén, ha reivindicado más investigación e inversión en materia de agua y la lucha contra la sequía.

Entre los datos aportados por Ávila, figura el consumo de agua por cultivos. Ha precisado que el olivar, con el 56 por ciento de la superficie regada (entre tradicional e intensivo) consume el 28 por ciento de los recursos de la cuenca, mientras que otros cultivos como el arroz, con solo el cuatro por ciento de la superficie regada consume un 15 por ciento de los recursos. En resumen, 500.000 hectáreas de olivar consumen 700 hectómetros cúbicos, frente a los 377 que consumen 36.000 hectáreas de arroz.



En lo que se refiere a la productividad, ha afirmado que cada metro cúbico de agua empleada en olivar aporta 6,5 veces más valor económico que el usado en cultivos como el arroz. En concreto, el olivar produce 1,50 euros por metro cúbico de agua consumida, frente al arroz que produce 0,23 euros por metro cúbico de agua.

Con respecto al retorno social, el olivar de regadío del Guadalquivir duplica la mano de obra a la de secano, de forma que 500.000 hectáreas de olivar de regadío suponen un incremento de 6.000.000 de jornales, alrededor de 25.000 puestos de trabajo fijos.

En el ámbito medioambiental, el olivar es el sistema de cultivo más integrado en el paisaje, en el que se da un microclima muy parecido al del bosque mediterráneo y que alberga una gran diversidad de especies de flora y fauna más representativas del clima mediterráneo. Además, su carácter leñoso permite una alta captura de carbono de más de diez kilos de CO2 por litro de aceite producido, por lo que frena las emisiones de gases de efecto invernadero.

En este primer panel de la jornada, también ha intervenido Eduardo Díaz, vicepresidente de la Comunidad de Regantes de Andalucía (CREA). A su juicio, la ampliación de regadíos supone el "suicidio asistido del Guadalquivir", de modo que ha reclamado "medidas urgentes e inaplazables", al tiempo que ha pedido la paralización inmediata del Plan Hidrológico del Guadalquivir, "para que no siga haciendo más daño".

Igualmente, ha apostado por una provincialización de los recursos y ha insistido en que el problema de la falta de agua no se resuelve con que llueva mucho, sino con una mejor gestión, haciendo previsiones. También ha demandado una nueva Ley de Aguas, ya que la actual, que viene del siglo XIX, no sirve en la actualidad, a pesar de las modificaciones que se han hecho.

Díaz ha finalizado su intervención proponiendo que a la estrofa del himno de Andalucía en la que se dice '¡Andaluces, levantaos! ¡Pedid tierra y libertad!' se le añada la palabra agua, porque sin ella no hay tierra.

Tras este panel, moderado por el catedrático de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la UJA Cristóbal Molina, ha intervenido el director adjunto de Cajamar Innova, Juan Carlos Gázquez. En su opinión, las confederaciones hidrográficas fueron un gran invento en su momento pero necesitan adaptarse al momento actual. Ha insistido, además, en que las claves para afrontar el reto del agua son los nuevos modelos de gobernanza, infraestructuras e innovaciones tecnológicas.

Después ha tenido lugar otro panel multidisciplinar, moderado por el catedrático emérito de Derecho Internacional Público de la UJA Juan Manuel Faramiñan. Le ha seguido la conferencia de clausura: 'Agua y sistemas agroalimentarios: Santa Sede y comunidad internacional en diálogo', a cargo de monseñor Fernando Chica, observador permanente de la Santa Sede ante la FAO, el FIDA y el PMA.

La jornada comenzó la inauguración presidida por el rector de la UJA, Nicolás Ruiz, para el que "la ciencia y la innovación tecnológica han de ponerse al servicio de un equilibrio sostenible entre el consumo y los recursos hídricos disponibles, evitando perjuicios irreversibles en el medio ambiente".

"Deberán ser los organismos internacionales, los gobiernos, las empresas, las instituciones académicas y de investigación, así como la sociedad en general, las que habrán de aunar voluntades para que el agua, como fuente de la vida y como base de la agroalimentación, sea patrimonio de todos, se distribuya mejor y de manera socialmente justa y se gestione de forma sostenible y racional", ha comentado.

Con esta jornada se ha pretendido afrontar y evaluar desde una perspectiva multidisciplinar, tanto científica como práctica, las carencias actuales que plantean los recursos hídricos en su relación con la agroalimentación. Todo ello, en el contexto de las tendencias y retos para optimizar los recursos hídricos que se marca como objetivo el Día Mundial del Agua.