La iglesia de San Lorenzo de Úbeda recuperará la cúpula del altar mayor

La primera fase de este proyecto conjunto de la Fundación Caja Rural de Jaén y Fundación Huerta San Antonio será ejecutada por Isabel Alba

 La iglesia de San Lorenzo de Úbeda recuperará  la cúpula del altar mayor

Foto: EXTRA JAÉN

Visita la Iglesia de San Lorenzo de Úbeda

La Fundación Caja Rural de Jaén y la Fundación Huerta de San Antonio vuelven a unir sus caminos para la recuperación de la iglesia de San Loreno de Úbeda. En esta ocasión, ambas entidades han suscrito un acuerdo de colaboración para dar forma a la primera fase de un proceso de restauración que contemplará la cúpula del altar mayor de este tempo de la ciudad ubetense.

Durante el acto de presentación de esta restauración, que será llevada a cabo por Mª Isabel Alba Fernández de Moya, el gerente de la Fundación Caja Rural de Jaén, Luis Jesús García-Lomas, ha subrayado que se trata de una cúpula “muy interesante, al igual que el resto de la iglesia, y que merece la pena recuperar. Poco a poco seguimos trabajando para que podamos interpretar esta iglesia tal y como se ideó”.

El trabajo de restauración se va a centrar en “el soporte de la cúpula, que presenta muchas grietas. Además, tiene muchas zonas en las que el yeso, debido a la humedad, está bastante disgregado y hay que devolverle la cohesión para que la estructura se mantenga fuerte”, ha explicado Mª Isabel Alba.
Por su parte, el gerente de la Fundación Huerta de San Antonio, Manuel Berlanga, ha agradecido la colaboración de la Fundación Caja Rural de Jaén: “Contamos desde el inicio con su apoyo, que tan buenos resultados ha dado como en el caso del alfarje mudéjar del sotocoro. Con esa misma filosofía, otro empeño es rehabilita toda la cúpula de altar mayor, un trabajo que se desarrollará en varias fases”, ha valorado.



El deteriorado estado de las cubiertas ha ocasionado un impacto negativo en la capilla mayor. Sus principales enemigos, además del paso del tiempo, han sido los cambios de temperatura y la humedad, que han sometido a los materiales del conjunto a un importante estrés físico.
Otros deterioros que se observan en este espacio son manchan provocadas por antiguas goteras y escorrentías. También grietas, algunas de ellas en las pechinas, así como pérdida de volúmenes y afloraciones de sales, estas últimas más localizadas en la parte inferior de la capilla, donde existe una disgregación general de la piedra que conforma su arquitectura.

En el interior de los lunetos de la cúpula, apenas quedan tímidos restos de policromía monocroma de estética rococó, simulando cornucopias, sobre los que se aplicará tratamiento de fijación y reintegración mediante veladuras. Mientras que los bosquejos del muro frontal, atribuidos a discípulos de Palma Burgos, presentan un deficiente estado de conservación.

Cúpula del altar mayor de la iglesia de San Lorenzo

Uno de los espacios más monumentales que conserva en su interior la iglesia de San Lorenzo de Úbeda es la capilla de su altar mayor. Según el historiador del arte José Manuel Almansa, debió de realizarse hacia el año 1765. Su planta es cuadrada, ligeramente irregular, y está situada en el extremo oeste de la nave central, separada de ella mediante un gran arco toral.

El conjunto de la capilla mayor está cubierto por una hermosa cúpula de estilo barroco, que encuentra soporte arquitectónico en el arco toral, junto con dos contrafuertes situados en los laterales que le aportan estabilidad. La construcción de estos elementos se realiza a costa de suprimir parte de una capilla gótica situada en su parte derecha, donde ahora se levanta un grueso muro de piedra a modo de estribo.

El espacio de la capilla mayor está cubierto por una fabulosa bóveda de media naranja, que se apoya en un bello entablamento o cornisa de formas ondulantes, con ocho ménsulas en cada una de sus inflexiones.

En el muro frontal del altar mayor existen también unas curiosas pinturas murales, realizadas a mediados del siglo XX por discípulos del escultor Palma Burgos, cuando el templo, abandonado, sirvió como improvisado estudio de arte. Se encuentran bocetos de la Virgen María y el Santo Rostro, clavos y coronas de espinas, crucificados o el escudo del Atlético de Madrid, así como los retratos del ebanista Ramón Cuadra y Salomé Borrego, esposa del pintor Marcelo Góngora. Obras de este último, junto con los trampantojos de la botella de vino y la morcilla, o los célebres billetes de 500 y 1.000 pesetas.