El arte urbano y la batalla de Baecula en Santo Tomé

En la localidad de Santo Tomé se hace más evidente su identificación con la batalla de Baecula gracias a un gran mural en uno de los lugares mas transitados del municipio, sobre la contienda entre el ejército cartaginés y el romano

El pintor Faustino Castillo ha finalizado una nueva obra artística de arte urbano que representa una escena de la batalla de Baecula, entre el cartaginés Asdrúbal Barca y Publio Cornelio Escipión el Africano por parte del ejercito romano. El pintor ha conseguido plasmar una composición de gran realismo, logrando esa identificación del municipio donde se libró la batalla decisiva de la segunda guerra púnica, en el entorno del cerro de las Albahacas.

El polifacético artista Faustino Castillo Plaza nacido en La Iruela y afincado en Peal de Becerro ha dejado la impronta de su arte urbano en fachadas de toda España y parte del otro país. Entre 2022 y 2023 ha realizado una galería completa en torno al olivar y su simbología en Peal de Becerro, convirtiendo la localidad en una de las mayores pinacotecas al aire libre que existen.

Ahora el Ayuntamiento de Santo Tomé le ha dado total libertad para representar la batalla de Baecula “he hecho una composición que representa un poco lo que ocurrió entre cartagineses y romanos como aportación a incrementar el patrimonio de nuestros pueblos”.  Se trata de un mural de 19 x 5.50 metros realizado con pinturas acrílicas ecológicas. 

El mural se ha llevado a cabo en una zona antes degradada y recuperada por el ayuntamiento como parking público en la línea de la Avenida de Baecula. Y como ha explicado el alcalde esta es la primera obra de arte de Faustino en Santo Tomé donde hay previsto encargarles más trabajos, “nuestra intención es posicionar al municipio en su relación con la batalla y el mural viene a realzar con esta gran obra de arte en este aparcamiento a la vista de todos”.

Con un centro de interpretación aún en construcción sobre este importante acontecimiento históricos que tuvo lugar en el 208 a.C. Este mural captará, sin lugar a dudas, el interés del visitante por conocer el rico patrimonio arqueológico de Santo Tomé, así como que los tómesenos se sienta aún más identificados con su historia.