IU lamenta la retirada "precipitada" de la candidatura del olivar

Toni Valero ha pedido a la Diputación y a la Junta "que no tiren la toalla" con una iniciativa que supondría "una enorme oportunidad"

 IU lamenta la retirada "precipitada" de la candidatura del olivar

Foto: EXTRA JAÉN

Antonio Ortega y Toni Valero.

El coordinador de IU en Andalucía, Toni Valero, ha lamentado este jueves la "precipitada" retirada de la candidatura de los paisajes del olivar a Patrimonio Mundial. Por ello, ha pedido a la Diputación de Jaén y a la Junta "que no tiren la toalla" con una iniciativa que supondría "una enorme oportunidad" y que "no pone ninguna pega" al derecho de propiedad y a la actividad conforme ahora se desarrolla.

En una comparecencia en Jaén junto a Antonio Ortega, especialista en materia de patrimonio agrario y desarrollo rural, ha aludido a la decisión que la comisión institucional del expediente tomó el 29 de abril para retirarlo --había sido enviado a la Unesco con la previsión de analizarse en su asamblea general de 2025-- ante el rechazo de parte de los agricultores afectados, especialmente en la denominada zona 14, en la Campiña jiennense.

Tras señalar la importancia de proteger el medio rural y poner en valor el patrimonio cultural y paisajístico, ha considerado "fundamental" que el olivar pueda ser declarado Patrimonio Mundial con una candidatura que "llevaba diez años trabajándose a fuego lento por parte del tejido social", con el impulso de la Diputación de Jaén.

Una colaboración --con la implicación de las diputaciones de Córdoba, Granada, Sevilla y Málaga; las universidades de estas provincias, la Junta de Andalucía, organizaciones agrarias, cooperativas y fundaciones como Juan Ramón Guillén o Savia-- que "ponía encima de la mesa algo que para todas y todos era beneficioso" para la comunidad y la provincia.

En este punto, ha dicho no entender "cómo, porque hayan surgido dudas en una de las 14 zonas afectadas en torno a los derechos de propiedad de las explotaciones agrarias" y que "quedan claramente resueltas en el expediente", haya llevado a la Diputación jiennense y al Gobirno andaluz "a echarse atrás en el último minuto del proceso en el cual ellos tenían que intervenir".

"Esta manera de gestionar esto nos parece que es absolutamente precipitada, nos parece que es incoherente y un profundo error", ha apostillado el coordinador regional de Izquierda Unida.

En primer lugar, ha afirmado que "queda un año" y "hay tiempo de sobra para que la Junta de Andalucía informe y disipe dudas" en torno a esos derechos de propiedad. Ha hablado también de incoherencia cuando esta iniciativa es "entendida por parte del Gobierno andaluz, de la Diputación de Jaén y de todos los agentes sociales implicados como una enorme oportunidad", así como de "un profundo error que tira por la borda diez años de trabajo".

POSICIÓN "OPORTUNISTA"

"Por lo tanto, pedimos a la Diputación de Jaén, al Gobierno andaluz que no tire la toalla, que se arremangue y que rectifique saliendo de esta posición oportunista del 'bienqueda' de última hora que puede dar por traste un trabajo de diez años y unas expectativas de la sociedad", ha recalcado.

Valero ha afeado que quienes ponen "miedos infundados no están contribuyendo a lo mejor" y ha criticado que la Junta, "de manera oportunista" al escuchar "algo de ruido", se "eche para atrás". "No demuestra la valentía que debería tener como gobierno y es que cuando hay una buena propuesta hay que pelear por ella", ha dicho, no sin apostar también por "hacer mucha pedagogía".

Algo necesario ante una probablemente "mala comunicación" y, "casi con seguridad también, posiciones interesadas" en transmitir determinada información, en opinión de Ortega, quien ha puesto como ejemplo que "se ha dicho que eso ponía en peligro el derecho de propiedad", pero "no se establecen ningún tipo de medida" que impida cuestiones como pasar de un olivar tradicional a uno superintensivo.

"Esa duda se planteó en un determinado momento y se respondió por escrito que no hay más impedimentos de los que ahora hay, por ejemplo, con las medidas de la PAC, no hay nada más que eso, por lo tanto no hay ningún tipo de medida que se contemple ahí que pueda evitar posibles cambios", ha asegurado.

PAISAJE VIVO Y EN TRANSFORMACIÓN

De hecho, ha recalcado que "el propio expediente contempla, y es incluso casi su título", que se trata de un "paisaje cultural evolutivo, vivo y, por lo tanto, que se transforma, se ha transformado a lo largo de los siglos".

Ha detallado, igualmente, que parte de la zona 14, "ya lleva mucho tiempo incluida en el catálogo de bienes culturales de la Junta de Andalucía", que era otro de los argumentos sobre posibles restricciones a su actividad. Sin embargo, "no ha pasado nada" y la gente ha seguido cultivando.

"Por qué Andalucía no va a ser como las zonas vitivinícolas de Cinque Terre en Italia; la zona vitivinícola del Duero en Portugal, los cultivos del lúpulo en la República Checa, de agave y la industria del tequila en México. Todos esos espacios están declarados Patrimonio Mundial y, que yo sepa, están encantados", ha incidido.

Este experto y militante de IU ha considerado que "añadiría riqueza a su producto", además de "reivindicar y dignificar el papel de agricultoras y agricultores en la creación de cultura", con "una actividad tan fundamental para el ser humano como es dar de comer y generar ese tipo de bienes".

Así las cosas, ha solicitado "que se retome el proyecto, que se den todos los procesos de información y comunicación que haya que hacer para eliminar dudas", de forma que se pueda presentar "con garantía" ante la Unesco, que tendría la última palabra.

EL EXPEDIENTE



El expediente de los 'Paisajes del Olivar en Andalucía. Historia milenaria de un mar de olivos' a Patrimonio Mundial fue impulsado hace una década por la Diputación de Jaén con la implicación de las diputaciones de Córdoba, Granada, Sevilla y Málaga; las universidades de estas provincias, la Junta de Andalucía, organizaciones agrarias, cooperativas y fundaciones como Savia o Juan Ramón Guillén.

Se remitió el pasado mes de enero a la Unesco y estaba previsto que su inclusión en la Lista de Patrimonio Mundial se debatiera en la asamblea de 2025.

Ponía el foco en un paisaje cultural, agrario, evolutivo y vivo, cuyos valores a conservar tienen que ver precisamente con la continuidad de su productividad y su sostenibilidad económica, ambiental y social. Un paisaje patrimonial que es el resultado del esfuerzo de muchos agricultores y agricultoras, que han dedicado su vida al cultivo y cuidado de estos árboles que han permitido y permiten el sustento de muchas familias y territorios en Andalucía.

Este expediente identificaba 14 zonas de paisaje cultural, que se han delimitado en función también de la historia de este paisaje: Montoro y su entorno (Córdoba), Molino Ducal San Fernando (El Carpio, Córdoba), Haciendas de Tavera y La Buzona, (Carmona, Sevilla), Hacienda de San Ignacio de Torrequemada (Aljarafe, Sevilla), Haciendas de La Soledad y Guzmán (Los Alcores, Sevilla), Cortijo La Jara (Jerez de la Frontera, Cádiz), bancales de Nigüelas y almazara de La Erilla del Valle de Lecrín (Nigüelas, Granada), Olivares de Santa Catalina (Orcera, Jaén), El Ruedo (Almedinilla, Córdoba), Alfar de Écija (Écija, Sevilla), Cortijo Blanco (Periana, Málaga), Campiñas de Jaén (Porcuna y Lopera, Jaén), Hacienda La Laguna (Baeza, Jaén) y Zuheros (Sierras Subbéticas Córdoba).

Las zonas elegidas reflejaban valores excepcionales, que se concretan en una serie de expresiones materiales e inmateriales que van desde los tipos de parcelas y las variedades de olivar hasta las muestras arqueológicas y arquitectónicas, así como su patrimonio inmaterial, como puede ser la cultura campesina, las tradiciones o los espacios de interpretación, entre otros recursos.