OPINIÓN | Jaén: La hora de la industria

Artículo de Óscar Arévalo Chacón, presidente de PROA (Asociación de Empresarios y Profesionales)

 OPINIÓN | Jaén: La hora de la industria

Foto: EXTRA JAÉN

Óscar Arévalo.

El jueves pasado asistí al I Encuentro Jaén por Industria promovido por la Diputación Provincial y la Fundación Unicaja. Aplaudo y agradezco la iniciativa de nuestra Diputación. A pesar del evidente progreso del turismo y la agricultura, la industria sigue siendo uno de los
indiscutibles caminos para avanzar en el desarrollo de nuestro territorio.

Existe una relación contrastada y directa entre el tejido industrial y la tasa de paro. A más PIB industrial, menos paro. Así de simple. En nuestro país todas las provincias que superan el 20% en su actividad industrial tienen una tasa de desempleo inferior al 10%.




Casos hay muchos y variados*:
*Datos del Instituto Nacional de Estadística EPA 3er Trim2023


Y ahora la otra cara de la moneda que soporta mayores tasas de desempleo por tener un tejido industrial débil:  


A la vista de las cifras, podríamos concluir que, aunque aún lejos de las tasas deseables, en el contexto nacional, Jaén es una provincia industrial. No obstante, deberíamos preguntarnos por qué Jaén, con la tasa de PIB industrial más alta de
Andalucía tiene, al mismo tiempo, el mayor índice de desempleo en nuestra Comunidad
Autónoma, casi duplicando la media nacional. Y lo peor es que se trata de una situación recurrente (aún me niego a llamarla “estructural”). Año tras año Jaén sigue liderando los rankings de desempleo y a nadie parece importarle demasiado.

A medida que nos alejamos de un tejido industrial robusto nos vamos acercando a tasas de
paro más altas, con empleos menos estables, peor remunerados y de menor valor añadido.
Por lo general, la inversión industrial suele traer consigo puestos de trabajo indefinidos, bien pagados y convenios colectivos estables, lo que deviene en paz social, progreso y prosperidad.

Esta riqueza se extiende por el territorio en forma de consumo y demanda de bienes y servicios y, por lo tanto, genera un efecto tractor allí donde se instala.

El I Encuentro Jaén por Industria es un punto de partida que celebro, pero no es, ni mucho
menos, suficiente. Aspiramos a avanzar. Tenemos que avanzar.

Tratar de alcanzar, o al menos aproximarnos, a ese 20% de PIB industrial supone un desafío
mayúsculo y más en un entorno nada favorable para las empresas y los empresarios. No resulta extraño que en un país donde, en general, no se reconoce al empresario como
generador de riqueza y prosperidad, la máxima aspiración de toda una generación, salvo
escasas excepciones, sea formar parte de la nómina pública, esto es, ser funcionario. Ahora deberíamos preguntarnos: ¿cómo podemos incrementar el PIB industrial en Jaén?, ¿cómo podemos contribuir al crecimiento sostenido y sostenible de la industria ya instalada?, ¿cómo podemos ayudarle a incrementar su tamaño y dimensión para mejorar su
competitividad?, ¿cómo podemos atraer inversión industrial a nuestro territorio?, ¿a quién
corresponde?, ¿cómo podemos incentivar el desarrollo de la industria 4.0?, ¿cómo podemos
estimular la creación de nuevas empresas industriales?, ¿cuál es el papel de nuestra
Universidad en todo este gran desafío?

En una próxima entrega trataré de aportar algunas propuestas sobre las que debatir. Ahora
sólo me resta dar la enhorabuena, en mayúsculas y en negrita, a mi querido amigo y
compañero de PROA, Ángel Llavero, CEO de Meltio, por su inspiradora intervención en el
encuentro. Ángel nos propone, con su verbo sencillo, natural, apasionado e ilusionante, como es él, que, por muchos motivos, CETEDEX incluido, tenemos por delante enormes
oportunidades para la industria de Jaén. Ahora nos toca a los empresarios tener la astucia, el coraje y la bravura de no dejarlas pasar.