"Tendremos un 2025 movido si no se cumplen nuestras reivindicaciones"
Entrevista al Secretario de Acción Sindical del Sindicato de Enfermería SATSE, Cayetano J. Jiménez Olmedo
Foto: SATSE
Cayetano J. Jiménez Olmedo.
¿Qué balance hace de este año para los enfermeros/as y los fisioterapeutas andaluces?
Ha sido 2024 un año de reivindicaciones muy importantes en Andalucía, ya que nos obligó a convocar una huelga general en el Sistema Sanitario Público Andaluz por los incumplimientos de acuerdos previamente firmados en un Pacto por la Mejora de la Atención Primaria, en materia de Carrera Profesional, y de Accesibilidad por parte de los usuarios al Sistema Sanitario Público Andaluz. Movilizaciones, y presiones que provocaron una crisis de gobierno que precipitaron cambios a nivel de la propia Consejería de Salud, pero que no han servido para materializar las reivindicaciones que se trasladaron a la Junta de Andalucía y que siguen vivas y activas a fecha de hoy.
El Servicio Andaluz de Salud y el propio Gobierno de la Junta de Andalucía tienen que entender que el incumplimiento de estos acuerdos provoca perder una oportunidad importante tanto para frenar el éxodo de profesionales sanitarios fuera de nuestra Comunidad Autónoma, donde encuentran mejores condiciones laborales, un mayor reconocimiento a nivel profesional, mayor estabilidad laboral,… como para garantizar una mejor accesibilidad al Sistema Sanitario Público Andaluz, donde a través del Pacto de Mejora de Atención Primaria, la adecuación de las plantillas, la incorporación y consolidación de nuevos puestos de trabajo, redundaría en una mejor atención sanitaria a los usuarios y de sus necesidades.
¿Cuáles son las líneas de trabajo y reivindicaciones para 2025?
Tendremos un 2025 movido, muy activo sindicalmente hablando y reivindicativo, porque nuestros afiliados y nuestros profesionales son conscientes del ninguneo e incluso el desprecio percibido por parte de una administración que no sólo no responde a las expectativas de una población que apuesta por una Sanidad Pública de calidad, sino que además no respeta a sus profesionales, ni los pactos previamente acordados con la Consejería de Salud, que fueron firmados con la Consejería
¿Cuáles son esas líneas de trabajo a nivel andaluz y estatal?
A nivel estatal podemos comenzar con la demanda de una jubilación anticipada para las Enfermeras y Fisioterapeutas; la reclasificación profesional dentro del Grupo A como A1; la Ley de Seguridad del Paciente o Ley de Ratios; atajar las lacra de las agresiones a los profesionales de la Salud. Y a nivel autonómico, el reconocimiento del solape o tiempo de relevo en todo el Estado y la revisión del actual Modelo de Carrera Profesional.
Vayamos por partes, ¿en cuánto a la jubilación anticipada, cuál es la postura de SATSE?
Las condiciones laborales de las enfermeras y enfermeros son especialmente gravosas y penosas a lo largo de toda su trayectoria profesional. Todos los enfermeros y enfermeras se ven sometidos a numerosos riesgos:
BIOLÓGICOS: Las enfermeras y enfermeros son los profesionales sanitarios que pasan más tiempo en contacto directo con los pacientes por lo que tienen un mayor riesgo a una exposición a agentes biológicos, como son las bacterias o virus (SARS-CoV-2, hepatitis B y C, o el de inmunodeficiencia humana –VIH-, entre otros), y pueden contagiarse por cortes, pinchazos, salpicaduras…
QUÍMICOS: Las actividades desarrolladas por los enfermeros/as en los hospitales, centros de salud y establecimientos sociosanitarios hacen que estén en contacto permanente con sustancias químicas y radiaciones peligrosas. Esta exposición es, generalmente, de baja intensidad pero de larga duración, por lo que el daño que se produce es a largo plazo, después de años o décadas de exposición.
FÍSICOS: El desempeño de las enfermeras y enfermeros relacionado con la manipulación manual de cargas, la higiene postural, los ruidos o el uso de pantallas de visualización de datos conlleva problemas físicos o mecánicos.
PSICOSOCIALES: El estrés y el síndrome del “profesional quemado”, burnout, de los enfermeros/as es uno de los problemas de salud más importante que les afecta.
Además, quiero destacar especialmente que todos los enfermeros y enfermeras tienen un contacto permanente con el dolor, el sufrimiento, la enfermedad y, en ocasiones, la muerte, lo que supone una carga emocional y laboral muy importante. La labor enfermera en el ámbito sanitario y sociosanitario conlleva, además, la necesidad de prestar servicios de manera permanente y continuada a lo largo de todo el día y el año, lo que requiere que se trabaje a turnos y por las noches, festivos y guardias.
¿Qué supone trabajar a turnos para los enfermeros y enfermeras?
Esto impide al organismo adquirir rutinas de sueño, alimentación y descanso que, según multitud de estudios científicos, afectan a su salud y bienestar psicosocial.
Datos a tener en cuenta: mayor morbilidad y mortalidad.
· La OIT (Organización internacional del Trabajo) declara que los trabajadores de turno de noche pierden 5 años de vida por cada 15 años de trabajo en turno de noche.
· Un estudio publicado por American Journal of Preventive Medicine. En él se concluye que existe mayor mortalidad asociada al turno de noche,
· La OMS revela una relación entre trabajo nocturno y desarrollo de tumores y cánceres, de mama en mujeres y próstata en hombre.
· El Instituto Nacional de Seguridad y Salud Ocupacional de Estados Unidos (NIOSH), indica que los profesionales sanitarios tienen tasas más altas que otras profesiones de suicidio, depresión y ansiedad relacionados todas ellas con el estrés laboral.
¿Qué beneficios conlleva la jubilación anticipada para su profesión?
La posibilidad de acceder a la jubilación anticipada para las enfermeras y enfermeros de mayor edad mejoraría la atención a los ciudadanos y pacientes y el funcionamiento del Sistema Nacional de Salud dado que los enfermeros y enfermeras, por la naturaleza de su trabajo y la complejidad del mismo, necesitan, debido a una larga trayectoria profesional y en unas condiciones laborales difíciles, de una pericia y habilidades específicas, así como un estado de permanente alerta y vigilancia que se ven afectadas por la edad, contribuyendo además al objetivo de conseguir un envejecimiento activo y activos en salud a nivel comunitario, con los que seguro el Sistema Sanitario Público se verá reforzado.
¿Por qué la necesidad de ser Grupo A?
Nuestra profesión sufre una injusta discriminación profesional que se mantiene desde hace ya más de quince años. Los cerca de 400.00 enfermeros, enfermeras y fisioterapeutas de nuestro país permanecen en una categoría profesional dentro de la Administración Pública, el subgrupo A2, que supone una clara situación de desigualdad y discriminación con respecto a otros profesionales y que imposibilita y dificulta su avance y desarrollo profesional. Se trata de una situación que no tiene ninguna razón ni fundamento desde hace más de quince años, cuando se comenzó a implantar en España el Espacio Europeo de Educación Superior, promovido por los Acuerdos de Bolonia, y se extinguiesen los planes de estudios de licenciatura y diplomatura.
En la actualidad, son titulados universitarios todos aquellos que obtienen un título de Grado, entre ellos, las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, por lo que estos profesionales sanitarios deben pertenecer al Grupo A sin ningún tipo de distinción que, como ocurre, actualmente, les perjudica y minusvalora.
Además, teniendo en cuenta que Enfermería y Fisioterapia son profesiones con un alto porcentaje de mujeres, las administraciones están propiciando también una clara discriminación que impide un mayor desarrollo profesional y personal del colectivo femenino, parece perpetuarse la invisibilidad de estas profesiones eminentemente femeninas y el mantenimiento de evidentes “techos de cristal” que imposibilitan en la práctica que las mujeres puedan ocupar y desempeñar más puestos de responsablidad y liderazgo.
Por todo ello SATSE reclama que se modifique el artículo 76 del Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) para eliminar la vigente división en subgrupos A1 y A2 en el Grupo A, y que todos los titulados universitarios, caso de las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas, pertenezcan al Grupo A, sin subgrupos. Ya que la legislación actual es injusta y lesiva con nuestra profesión.
Esto supone que, por ejemplo, una persona que haya finalizado los estudios de Grado en Biología, Química, Ciencias de la Información, Economía, Psicología, Derecho, Informática, etc., todas ellos Grados universitarios con una dotación de 240 créditos ECTS y 4 años de duración, ostentará el subgrupo A1.
Por el contrario, si decide cursar el Grado de Enfermería, con la misma dotación de créditos (240 ECTS) e idéntica duración (4 años), se clasificará en el subgrupo A2. ¿Por qué? Simplemente, porque nuestra administración se niega a reconocer un hecho tan claro, manifiestamente injusto y discriminatorio.
Apelando a la justicia, al sentido común, a la coherencia y al consenso. Enfermería, al igual que otras profesiones como Fisioterapia, Trabajo Social, Terapia Ocupacional, Podología, etc., necesita que se lleve a cabo una modificación del marco jurídico del empleado público que conduzca a una reclasificación profesional, debemos recurrir al sentido común: a igualdad de formación universitaria igual clasificación profesional.
Naturalmente este cambio no puede ser a costa de perpetuar el agravio y discriminación que sufren enfermeras y fisioterapeutas desde hace 17 años, al seguir sin reconocer económicamente de manera adecuada la clasificación profesional que les corresponde dentro de la administración pública. Para SATSE, aprobar el nuevo Estatuto Marco con estas condiciones supondría una clara agresión hacia enfermeras y fisioterapeutas. A lo que estamos dispuestos a admitir.
¿Explique la necesidad de la Ley de Seguridad del Paciente y la mejora de la ratio enfermera/paciente?
En la mesa del congreso de los diputados se acordó el 14.03.23 que la Ley de Seguridad del Paciente impulsada por SATSE continuara su tramitación parlamentaria después de sufrir un bloqueo de más de dos años. Esto es un paso esencial para garantizar que los pacientes sean adecuadamente atendidos con una ratio adecuada de paciente/enfermera.
El Congreso de los Diputados por segunda vez, ha sido el lugar elegido para debatir una Proposición de Ley sobre ratios de enfermera para garantizar la seguridad del paciente en centros sanitarios y otros ámbitos. “Los estudios demuestran que el déficit de enfermeras provoca mortalidad y comorbilidad”, De hecho, por cada paciente por encima de siete que tiene que atender una enfermera, aumenta la mortalidad un 4 por ciento, según demuestran diversos estudios.
La importancia de la aprobación de esta ley, es porque garantizará la seguridad y la calidad de los cuidados a los pacientes. Pero, además, mejorará las condiciones laborales de miles de enfermeras cuyas condiciones ahora mismo son precarias. Esta ley se presentó en 2019 y desde entonces y a pesar de que se tomó en consideración en el pleno por 312 votos favorables, ha sufrido 83 ampliaciones de plazo de enmiendas, todo un récord de vergüenza. El retraso afecta a los profesionales, puesto que, en la actualidad, una enfermera puede atender hasta 20 o 25 pacientes en un hospital. Nuestra propuesta establece que el número máximo debería situarse entre seis y ocho pacientes por enfermera. Es una diferencia abismal que repercute directamente en la calidad de la atención sanitaria y en la seguridad de los pacientes.
El retraso en la aprobación de esta ley está afectando gravemente tanto a los profesionales como a los pacientes. La sobrecarga laboral de las enfermeras es una realidad que se ha ido agravando en los últimos años por la falta de plantillas suficientes. Se trata de una situación que, según diversos estudios, está generando importantes secuelas en la salud física, psicológica y emocional de los profesionales. Estrés y ansiedad que son responsables de la creciente desmotivación de las enfermeras. Los efectos de la sobrecarga asistencial en enfermería no solo afecta a los profesionales, sino que también aumentan la mortalidad y también hay un impacto significativo en la morbilidad y en los costes sanitarios, según apuntan varios estudios científicos sobre el tema así:
La sobrecarga en enfermeras de unidades hospitalarias provoca un aumento de las infecciones intrahospitalarias y un incremento de los reingresos, En Atención Primaria esta misma sobrecarga provoca una peor gestión de pacientes mayores de 65 años, los más vulnerables lo que conlleva estancias hospitalarias más largas y reingresos, que derivan en un mayor coste sanitario. Por cada paciente adicional asignado a una enfermera por encima de siete, la mortalidad aumenta un 4 por ciento. La falta de enfermeras en hospitales incrementa el riesgo de muerte en un 13 por ciento. Cuando las enfermeras de la UCI atienden a más de 2,5 pacientes en su turno, el riesgo de muerte de estos pacientes, se triplica.
El concepto de seguridad del paciente no es nuevo, pero es necesario recordar que esta seguridad sirve para prevenir complicaciones que se pueden evitar si los profesionales cuentan con las herramientas necesarias y eso incluye los recursos humanos. No es solo una cuestión económica, es una cuestión de no poner en valor el papel de las enfermeras en el SNS.
¿Qué es el solape de jornada?
Varias Comunidades Autónomas no reconocen aún el solape de jornada Andalucia es una de ellas. En concreto, Galicia, Asturias y Castilla La Mancha siguen sin reconocer este derecho a sus enfermeras. Sin embargo, en la contra, 13 comunidades sí que reconocen este tiempo de trabajo a sus profesionales, algo que es fundamental en la atención especializada y que aporta seguridad y continuidad en la atención y cuidados a los pacientes. SATSE advierte que son más de 80 horas al año que siguen sin reconocerse, y por tanto precariza aún más a las enfermeras andaluzas.
El Solape es tiempo efectivo de trabajo, así las enfermeras siguen viéndose obligadas a “regalar” su tiempo al SAS en cada cambio de turno, pero además es totalmente necesario para la transmisión de información asistencial que garantiza la seguridad y la continuidad de los cuidados profesionales en el marco del proceso asistencial. “Durante el cambio de turno, se comentan de forma oral incidencias, necesidad de vigilancia, y todo tipo de aspectos relevantes para la salud de los enfermos y la debida continuidad asistencial en las unidades hospitalarias con ingreso, para evitar posibles riesgos.
Además, en Andalucia como ocurre con otros pactos firmados y que a día de hoy, siguen sin cumplirse como son el pacto de primaria, el pacto de Carrera y el de solape firmado por Diego Vargas Gerente del SAS en el 20 de septiembre del 2023 en el cual, dice textualmente en su punto 4. “Las partes acuerdan crear un grupo de trabajo que estudie y posibilite el reconocimiento como tiempo de trabajo efectivo el periodo dedicado por los enfermeros/as, enfermeros/as especialistas y fisioterapeutas a transmitir información clínica y del estado de salud de los pacientes entre los enfermeros que se relevan en los turnos de trabajo, así como entre los fisioterapeutas. Dicho grupo de trabajo estará constituido el 1 de octubre de 2023. Las conclusiones de este grupo de trabajo deberán estar terminadas, confirmando el tiempo medio de trabajo dedicado a transmitir la información clínica y del estado de salud de los pacientes, antes del 1º trimestre de 2024 y poder ser aplicado a lo largo del 2024.”
¿Por qué piden la revisión del Modelo de Carrera Profesional?
SATSE y tres sindicatos firmaron un acuerdo que hoy sigue sin cumplirse, incluso recientemente nos hemos dirigido al presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, solicitando su intermediación urgente ante la nefasta gestión y la nula capacidad de negociación que está demostrando la consejera de Salud, Rocío Hernández.
Hemos transmitido al presidente autonómico nuestra enorme preocupación tras la reunión mantenida el pasado 18 de noviembre con la consejera, y en la que esta se desvinculó tajantemente de los acuerdos firmados por su gobierno, como el Pacto de Atención Primaria y el nuevo marco de Carrera Profesional, entre muchos otros, y que nosotros subrayamos como beneficiosos para los profesionales del Servicio Andaluz de Salud porque contribuiría a frenar el incesante éxodo de profesionales a otras CCAA con condiciones laborales y retributivas más atractivas, e imprescindibles también para la mejora de la sanidad pública andaluza, ya que contaría con una plantilla más motivada y con unas condiciones laborales más acordes a nuestro entorno.
Es incoherente que la consejera justifique el incumplimiento de estos pactos, firmados por la Junta de Andalucía, que de hecho los calificó de “históricos” en ese momento, y no por la persona titular de la consejería por aquel entonces. También en dicha reunión la consejera nos comunica, que no creía en el modelo de Carrera Profesional pactado. Ante esta situación límite, que no genera otra cosa más que malestar entre los representantes de los trabajadores y los propios profesionales, y que va en detrimento de la atención sanitaria, se hace necesaria la intervención del presidente de la Junta de Andalucía, quien debe conocer de primera mano la importancia de estos pactos y el enorme perjuicio que supondría no cumplirlos, tanto por el bienestar de los profesionales como por el buen funcionamiento del sistema sanitario público andaluz.
¿Y sobre el pacto por la mejora de la Atención Primaria?
En cuanto a la mejora de la Atención Primaria, los siguientes puntos son los que nos afectan:
-Cumplimiento del punto 8:
El punto 8 del pacto se comprometía a alcanzar una dotación en plantilla de 411 Enfermeras Especialistas Familiar y Comunitaria a fecha 31 de diciembre de 2024, habiéndose tenido que incorporar al menos el 50% de las plazas a fecha 30 de junio de 2024. Hasta la fecha el cumplimiento de este punto está ofertado los 411 contratos por provincias y distrito, siendo la dotación de una por centro de salud. De estas ofertas se ha publicado ya el listado provisional y se han quedado sin cubrir el 60%, que tendrán que volver a ofertarse por Bolsa de Empleo o llegado el caso por ofertas específicas. Es imposible a día de hoy que a fecha 31 de diciembre de 2024 se encuentren cubiertas todas las plazas.
-Cumplimiento del punto 12:
En este punto la Administración se compromete a la incorporación en Atención Primaria de Fisioterapeutas. Asimismo, las Enfermeras Referentes Escolares adquirieron el compromiso de consolidar puestos de trabajo a partir de marzo de 2024 consolidando 411 plazas. Por último, se comprometieron a la creación de 91 plazas de Enfermeras Gestoras de Casos antes de finalizar el año 2026. Actualmente, la incorporación de los Fisioterapeutas a los que se compromete el Pacto está aproximadamente en torno al 50% de su cumplimiento. En cuanto a las Enfermeras Referentes Escolares continúan siendo contratos eventuales en la actualidad, sin que se haya consolidado ninguna plaza. Por último, sobre las Enfermeras Gestoras de Casos, actualmente, hay una dotación de 82 de las 91 plazas comprometidas.
-Cumplimiento del punto 14:
Cupo de Enfermera Referente en Pediatría, se comprometieron a trabajar la cartera de servicios en fecha 30 de junio de 2023. En la actualidad, no hay convocada una reunión hasta el próximo 11 de diciembre de 2024 para empezar a trabajar este punto. Y después de haber contratado a Enfermeras Referentes en Pediatría de forma eventual en el mes de octubre, sólo han sido renovadas el 20%.
-Cumplimiento del punto 17:
Condiciones laborales de los Equipos móviles y movilizables de atención urgente de los Dispositivos de Apoyo de Atención Primaria y equipos del 061. Se comprometieron a igualar a 31 de diciembre de 2024 a los profesionales de equipos móviles a las mismas condiciones laborales y retributivas, que los actuales equipos del 061. Con respecto a este punto, su cumplimiento. No se ha empezado a negociar.
-Cumplimiento del punto 18:
Punto sobre el desarrollo competencial en Atención Primaria de las Enfermeras Especialistas en Obst. y Ginec. (Matrona) que debía empezarse a tratar el 30 de junio de 2023. Ha habido una primera reunión en fecha 4 de noviembre de 2024, siendo la primera que se celebra, en la que la Administración ha hecho un análisis interno informando a las OOSS de la situación de las competencias actuales de las Matronas en Atención Primaria, y propone mantener reuniones con el Consejo Andaluz de Enfermería y Asociación Andaluza de Matronas. No sólo no se ha materializado por parte de la Administración dicho análisis competencial, sino que además hemos perdido matronas en todos los Distritos y Areas de Gestión Sanitario de la Provincia.
-Cumplimiento del punto 19:
Plan de Salud Mental que incluiría la incorporación de 8 enfermeros especialistas en salud mental. Hasta la fecha no se ha tratado nada de estas incorporaciones, no obstante, el plazo límite es hasta 2026.
-Cumplimiento del punto 20:
Complemento retributivo de Puestos de Difícil Cobertura. Este complemento hoy en día, no se está aplicando y no tenemos fecha de cuando piensan llevarlo a cabo.
En definitiva, tampoco el Pacto de Primaria se esta cumpliendo en los plazos pactados, no se puede dar esperanzas a los profesionales de la sanidad andaluza de unas mejoras laborales y retributivas, para después darle un cerrojazo, ¿se puede confiar en lo firmado con este gobierno?
¿Qué otras reivindicaciones tienen en la cartera?
Desde SATSE continuamos solicitando a la administración por el abono del 100% del CRP en la masa salarial fija mensual y contribuir así una mayor consolidación salarial evitando la “incautación por parte de la Administración de un porcentaje importante de la nómina” que se retribuye como factor variable.
También pedimos la Exención de noches para mayores de 55 años, ya que contribuiría a mejorar las condiciones laborales de las enfermeras que llevan una larga trayectoria laboral con trabajo a turnos, y mejoraría la seguridad de la atención sanitaria.
Por otro lado, la recuperación de paga extra integra. Desde SATSE seguimos insistiendo en la recuperación de unas condiciones retributivas que fueron empeoradas tras la crisis económica de 2008 y que deberían haberse repuesto ya que fue una medida de carácter temporal.
También para SATSE es fundamental el desarrollo de la Ley de Autoridad de Profesionales Sanitarios con el fin de apoyar a los profesionales del SSPP con el fin de reforzar su autoridad y procurando la protección y el respeto que le son debido en el ejercicio de sus funciones y responsabilidades en un contexto creciente del número de agresiones dentro del Sistema Sanitario Público Andaluz.
Solicitamos también la creación en la Bolsa de la plaza diferenciada de Enfermera de Emergencias Sanitaria. Sabemos que son muchas las reivindicaciones que llevamos a cabo, pero todas y cada una de ellas están cargadas de sentido, y por ello, y por el impacto positivo que muchas de ellas tendrían sobre la mejora de la Atención que prestamos los Profesionales Sanitarios de Enfermería y Fisioterapia, seguiremos pidiendo el apoyo necesario a nuestros compañeros, y a usuarios y asociaciones de pacientes para que nos acompañen, alienten y se unan con el objetivo de dignificar las condiciones laborales de nos permitan frenar el éxodo de enfermeras y Fisioterapeutas fuera de nuestra CCAA, y de Mejorar la Asistencia Sanitaria que prestamos los Profesionales del Sistema Sanitario Público Andaluz.