Endesa revisa 1.500 kilómetros de líneas eléctricas aéreas

De alta y media tensión

 Endesa revisa 1.500 kilómetros de líneas eléctricas aéreas

Foto: EXTRA JAÉN

Imagen de archivo

Endesa, a través de su filial de redes, e-distribución, está revisando 1.588 kilómetros de redes de alta y media tensión en la provincia de Jaén. Para ello, está utilizando helicópteros que sobrevuelan en la provincia 623 kilómetros de líneas aéreas de alta y 965 de media tensión.

En la comunidad andaluza, Endesa invertirá 1,4 millones de euros en la revisión de 13.747 kilómetros de líneas de alta y media tensión. Estas revisiones en helicóptero forman parte de la campaña de verano que la compañía eléctrica impulsa anualmente y que contempla la inspección de las infraestructuras y la realización de mejoras en la red.

Además, según ha informado la compañía eléctrica en un comunicado, esta campaña consta de una fase previa al periodo estival por la que se realizan labores de poda selectiva con el doble objetivo de asegurar la continuidad de suministro y reducir el riesgo de incendios, especialmente en un año en el que la sequía que sufren algunas zonas de España requiere extremar las medidas de protección.



Dentro de los programas de mantenimiento la compañía realiza inspecciones con helicópteros equipados con cámaras termográficas y de alta definición que permiten la inspección al detalle de las infraestructuras y del entorno que las rodea.

La información recibida se procesa aplicando técnicas de machine learning o deep learning y pasa a formar parte de una gran base de datos que permite ver cuáles son los problemas más habituales.

La termografía consiste en sobrevolar las líneas eléctricas con un helicóptero dotado de una cámara de rayos infrarrojos, que graba el cable y detecta si hay algún punto caliente --con una temperatura superior a la del propio cable, es decir, con riesgo de sobrecalentarse--, algo imposible de detectar a simple vista y que puede indicar un mal funcionamiento del cableado.

En el caso de detectar alguna anomalía, automáticamente se activa el mecanismo para arreglarlo. Este mantenimiento predictivo y preventivo de las instalaciones de la compañía permite evitar posibles incidencias y futuras averías. Las revisiones termográficas no solo se realizan con helicóptero, sino que también se complementan con revisiones oculares aéreas a pie de línea.

Otra labor clave es el escaneo láser de las líneas aéreas de alta tensión con una combinación de tecnología GPS y sensores láser, llamada LIDAR (Light Detection And Ranging).

Mediante este sistema se ha creado un fichero informático con una nube de puntos georeferenciados que permite medir cuáles son las distancias entre los cables y la vegetación, así como realizar estudios de crecimiento de la masa forestal que resultan muy útiles para planificar los trabajos de control de la vegetación.

La tecnología LIDAR, que se utiliza también desde drones, resulta también útil para el mantenimiento preventivo de las instalaciones al permitir la detección rápida de defectos en las infraestructuras.

Una de las tareas esenciales en la campaña de verano es la poda selectiva de la masa forestal que crece en torno a las líneas eléctricas, respetando el espacio estipulado por la administración entre las especies vegetales y los cables más cercanos. Son trabajos tanto en horizontal como vertical y se realizan siguiendo los criterios fijados por las administraciones y en colaboración con los agentes de cada zona.

Cada tres años, e-distribución contrata la actividad de tala y poda a diversas empresas que realizan estos trabajos anualmente en los meses de otoño e invierno para que las líneas y su entorno estén listas para el verano, época en la que el riesgo de incendios aumenta.

La creación de corredores bajo las líneas eléctricas que actúan como cortafuegos naturales es una tarea esencial a la que se incorporan cada año nuevos elementos para facilitar los trabajos: máquinas desbrozadora teledirigidas, cascos con multifunciones o un brazalete contra los golpes de calor que evalúa la temperatura, la humedad y las pulsaciones de quien lo lleva, y la alerta ante una situación de riesgo para que detenga el trabajo de forma inmediata.

Los trabajos de poda selectiva en torno a las líneas de e-distribución emplean a más de 2.000 personas al año en toda España, en gran parte procedentes del entorno, con lo que contribuyen al desarrollo local. Además, se está trabajando en el diseño de una formación específica con la creación de un nuevo título de especialista en tala y poda de redes eléctricas con especial énfasis en los aspectos vinculados a la seguridad