Primera Fiesta de la Resistencia de La Iruela
La recreación de la valerosa defensa contra el ejército napoleónico llegará en junio
Foto: María José Bayona
Equipo de organización de la I Fiesta de la Resistencia
Foto: María José Bayona
Equipo de organización de la I Fiesta de la Resistencia
Foto: María José Bayona
Equipo de organización de la I Fiesta de la Resistencia
Foto: María José Bayona
Equipo de organización de la I Fiesta de la Resistencia
Foto: María José Bayona
Equipo de organización de la I Fiesta de la Resistencia
La Iruela celebrará su primera fiesta tematizada en el segundo fin de semana de junio. El municipio se encuentra ya inmerso en la preparación del programa. Sobre todo en el taller de costura donde se confeccionan las distintas vestimentas de la época para la caracterización de los lugareños, que ya se ha presentado este sábado.
Un viaje en el tiempo situará a este bello pueblo a comienzos del siglo 19 en un periodo convulso ante el asedio del ejército napoleónico en nuestro país. Entre 1808 y 1814 tanto Cazorla como La Iruela le pusieron difícil la entrada en este territorio del Adelantamiento al ejército francés.
Desde 2020 el ayuntamiento de La Iruela venia planteando e intentando organizar esta "I Fiesta de la Resistencia" pero los dos años de pandemia habían dado al traste con poder celebrar esta fiesta tematizada, que ahora si se podrá realizar a principios de junio como cuenta el alcalde de la localidad Daniel Sánchez.
El punto de partida para la documentación histórica de los hechos más relevantes que acontecieron, es el libro del historiador Rufino Almansa Tallante. El que fuera párroco de la localidad y uno de los más reputados investigadores históricos de la comarca.
Los acontecimientos arrancaron con la llegada de un reclutador español, Hermenegildo Bielsa a Cazorla captando a los hombres de la zona para unirse al ejército español y detener la invasión francesa. Para evitar ir a la guerra tanto en el municipio cazorleño como en La Iruela solo quedaron mujeres y niños. Que con palos y piedras se enfrentaron valerosamente al asedio napoleónico. Causando como poco el retraso en sus intentos de invadir el pueblo. Destacan episodios como la destrucción de la iglesia de Santo Domingo de Silos, junto al Castillo de La Iruela, el Hospital de San Antón, numerosas ermitas. Como en la ermita de la Heredad, que albergaba a la Virgen de los Desamparados (patrona de La Iruela) donde perecieron un buen número de mujeres que se refugiaron en ella.
Muchos de estos relatos serán teatralizados e incluso se realizarán algunos corto metrajes para su difusión en internet.
Una fiesta cultural e histórica, que como indica el alcalde Daniel Sánchez tiene como objetivo “no solo recuperar nuestra historia sino que con ello pretendemos ofrecer un interesante reclamo y promoción turístico para nuestro pueblo”. Se pretende con estas acciones impulsar el comercio y los negocios de la localidad.
Además de la caracterización propia del municipio. Este sábado se han presentado, en el edificio de usos múltiples, los primeros trajes con los que se caracterizaran a los lugareños para situarlo en aquel periodo histórico. Un taller de costura que trabaja con un equipo de mujeres muy implicadas en lograr unas fieles réplicas de la época.
En el equipo organizador se ha contado con la experiencia Juan Ginés Jara y Arcadio Chillón, que ya han trabajado en las dos fiestas del Adelantamiento de Cazorla. “Aunque son historias cruentas propias de una contienda también son interesantes para representar tanto teatral como cinematográficamente a través de pequeños cortos para lograr una mayor difusión”, comenta Juan G. Jara.
Así mismo ocupara un destacado lugar la gastronomía. Se asistirá de esta manera a la importante defensa heroica que hizo la Iruela con la población más vulnerable.
También se hará coincidir con esta fiesta sobre la guerra de la independencia la tradición de la trashumancia en Burunchel.
Un proyecto cultural ambicioso e ilusionante para el municipio con el objetivo visibilizar la historia de La Iruela y convertirlo en un atractivo turístico que revitalice el municipio.