El robot quirúrgico Da Vinci supera las 160 cirugías en Jaén

Un 81% de los casos se corresponden con intervenciones a pacientes de la especialidad de Urología

 El robot quirúrgico Da Vinci supera las 160 cirugías en Jaén

Foto: JUNTA DE ANDALUCÍA

Robot Da Vinci.

El robot quirúrgico Da Vinci, que comenzó a operar en el Hospital Universitario de Jaén en abril de 2022, ha sumado al finalizar el primer semestre de 2024 un total de 162 cirugías, de las que en un 81% de los casos se corresponden con intervenciones a pacientes de la especialidad de Urología.

Los meses en los que mayor actividad ha mantenido el dispositivo han sido los de mayo de 2023 y especialmente el de 2024, con once cirugías realizadas.

Entre las intervenciones que se han desarrollado en el quirófano que alberga el Da Vinci en el Hospital Médico Quirúrgico, destaca la panproctocolectomía robótica y reconstrucción del tránsito intestinal mediante reservorio ileoanal en J que se practicó a inicios de verano del año pasado a un paciente muy joven y que valió la concesión por parte de la Delegación del Gobierno de la Junta de Andalucía de la Bandera de Andalucía al equipo que la desarrolló.

Consistió en la extirpación completa del colon y el recto, la realización de un reservorio con intestino delgado para poder restituir el tránsito intestinal y ofrecer la posibilidad al paciente de no tener que contar con una bolsa definitiva.

Las principales características del equipamiento tecnológico robótico para cirugía son la visión en tres dimensiones inmersiva y magnificada, lo que permite al cirujano ver el campo quirúrgico como si estuviera dentro del cuerpo del paciente, aumentando hasta diez veces el nivel de detalle.

Posee cuatro brazos robóticos que transmiten los movimientos de las dos manos del cirujano, permitiéndole mayor amplitud de movimientos, más precisión y eliminación el temblor del puso. Todo ello combinado con las tecnologías más avanzadas de instrumentalización robótica y de software.

Debido a su versatilidad, precisión y comodidad, ofrece a los pacientes una recuperación postquirúrgica más rápida y reduce el riesgo de complicaciones de la cirugía tradicional como el sangrado o menor daño de los tejidos, reintervenciones, transfusiones de sangre, fármacos para el dolor, o tratamientos por infecciones quirúrgicas, entre otras ventajas.

La estancia media del paciente en el hospital se reduce, lo que conlleva, según destaca la Delegación de Salud en un comunicado, que "a medio y largo plazo el sistema sanitario sea más eficiente".