Desde el cielo destellante, desquiciante, deprimente, decadente, la primavera anticipada de este febrero desenamorado pinta de color una cubierta vegetal en franco retroceso. El cambio climático nos encima mientras el negacionismo intenta hacer leña del árbol caído. Todo es mentira, proclama con cajas destempladas. El enero más cálido desde 1961. “Casi todos los árboles de mi niñez habían desaparecido; comprendí entonces cuán difícil iba a ser localizar los recuerdos, los pilares de mi vida antes de esta vida; era como volver a una casa sin alma, sin tejado, sin amor”. Ahora, todo son olivos. Las tractoradas dan paso a reuniones condenadas a la insatisfacción. El ministro Luis Planas convoca, este mismo lunes, a los consejeros autonómicos de Agricultura a fin de concretar un frente común de cara a Bruselas. Justo una semana después celebra sesión el Consejo de Ministros de Agricultura de la Unión Europea, a vueltas con la nueva PAC y sus conjuntivas disruptivas. ¿Y el exceso de burocracia? ¿y el opresivo/obsesivo cuaderno digital? ¿y los inaplicables ecoregímenes? ¿y el control de las importaciones? ¿y la imposible trazabilidad sanitaria? ¿Y el canto de cisne de las ‘cláusulas espejo’? ¿Y los tratados de libre comercio entre países desarrollados y economías emergentes? ¿Y la agenda verde 2030? ¿y el doble discurso del eurocomisario ‘ultra’ de Agricultura del partido polaco ‘Libertad y Justicia’, Janusz Wojciechowski? Pese a que la inflación se contenga en España, los supermercados han logrado subir la cesta de la compra un 20 por ciento. Si el aceite de oliva está caro, ¿quién sopa y traga, sopla y sorbe? El aceite de oliva virgen extra, en el último año, se encarece casi un 70 por ciento de media en los lineales. Sin embargo, la patronal de las grandes cadenas de supermercados jura, y perjura, que, en su bolsillo oleícola, apenas retiene un beneficio del dos y medio por ciento. La industria envasadora y exportadora de aceite de oliva español, entre la espada y la pared, atrapada entre la distribución comercial y la producción, asegura, al tiempo que se palpa, estar al límite tras tres años de continuadas subidas de costes. ¿Quiénes se quedan, pues, con la pasta? Las tres principales organizaciones agrarias -Asaja, Upa y Coag- y Cooperativas Agroalimentarias, tarde mejor que nunca, lograron que tres millares de chalecos amarillos, el miércoles, cortaran la A-4 en Guarromán. Los outsiders, que anticiparon la protesta una semana, liderados por Rogelio Heredia, un beatense que se refugió en los olivos familiares al estallar la burbuja, después de cerrar su agencia inmobiliaria capitalina, dicen no depender de Vox ni de Asolite, por más que Vox y Asolite se arroguen (a la luz y en la sombra) su poder de convocatoria (en sus citaciones sorpresivas e incontrolables del martes, 13, en Torreperogil, y el miércoles, 14, en La Carolina, no obstante, el movimiento alternativo del sector primario jaenita pinchaba sin paliativos). El estremecimiento de nuestro olivar perdura.
Moreno Bonilla –“Llámame Juanma”- inauguraba, el jueves de buena mañana, la mayor planta fotovoltaica flotante de Andalucía, por ahora, en la finca-cortijo Guadiana de la familia Vañó (Intelec Ingeniería ya ejecuta un proyecto análogo en Villatorres que duplicará la potencia, 2 megavatios). 260.000€ de subvención autonómica sobre 853.000€ de inversión total. Elogio de sostenibilidad, eficiencia energética y respaldo público a las justas reivindicaciones de las gentes del campo: “Cuando la ganadería y la agricultura tienen un problema, en Andalucía tenemos la obligación de salir de manera inmediata en su auxilio”. Juanma Moreno, concluyendo su intervención, torciendo el gesto, señalaba aquel bucólico manto circundante y no acertaba a recordar que, a ese suelo verde y florido, se le llama cubierta vegetal. No importa, lo que cuenta es la intención discursiva que, luego, por la tarde, en Jaén, en el marco del comité ejecutivo autonómico del PP, reiteraría merced a la angustia compartida por la sequía: “Cualquier responsable público que viva en una región meridional y seca como la nuestra tiene que preocuparse y no dormir sin saber cómo resolver la falta de agua”. Autocomplacencia respecto a la gestión de su gobierno durante el lustro transcurrido y denuncia de infrafinanciación estatal, pese a los 1.500 millones de euros invertidos en obras, “de recursos de la Junta”, subrayó, provenientes en buena medida de los fondos europeos de recuperación, vía administración central, matizan sus antagonistas socialistas. Juanma volvió a mencionar su compromiso con una provincia de Jaén donde los grandes proyectos del Ejecutivo andaluz, avanzados en campaña electoral, permanecen en ‘stand by’. Por ahora, mero empeño, ensueño. Para Toni Martín, portavoz parlamentario de los populares, de finde por estos pagos, de Linares a Martos, “cerca de 2.500 millones de euros -en la provincia jiennense- entre ejecuciones, en ejecución o en vías de ejecución, en proyectos preparados en este lustro". La suma de lo poco hecho y lo mucho por hacer, es decir, de 0 a 2.500 millones.
Reñidos con el favor político, la salud es siempre lo que más nos importa. Pliego de firmas para reducir la espera de una cita en el centro de salud del barrio. Andalucía pasa del puesto 14º al 7º en el ranking autonómico de hospitales por habitante. ¿La ciudad sanitaria de Jaén? El cielo puede esperar. Entretanto, el almacén central de material sanitario del SAS para toda la provincia, 8 años más tarde, cambiará de emplazamiento este próximo mes de mayo. Fueron 4 años de alquiler de una nave en el Polígono de los Olivares, más 4 prórrogas anuales, y el diseño de la reforma-ampliación del local. Adaptación de nave industrial para almacén logístico sanitario de la central de compras de la provincia de Jaén del SAS. 11 de octubre de 2021, “La Junta anuncia que destinará 267.000 euros a la adecuación del almacén central provincial de compras de Jaén, ubicado en el Polígono de los Olivares, lo que permitirá mejorar la distribución de productos sanitarios. El objetivo de esta actuación es ampliar la nave existente dotándola de las instalaciones y medios necesarios para que también pueda ser utilizada como almacén de gran volumen de productos sanitarios”. Cambio de planes. Donde dije digo, digo Diego. 29 de noviembre de 2022. Consejería de Salud y Consumo. Arrendamiento por 4 años de un inmueble de 5.000 metros cuadrados para la ubicación del almacén central de compras del SAS, en el Polígono Nuevo Jaén. Importe cuatrienal de la contratación directa: 727.574 euros, IVA incluido. El traslado, que requiere asimismo de adaptación, supondrá “ampliar en más de un 52 por ciento la superficie total”. Alquiler por alquiler. Solo con el monto de uno de los dos contratos de arrendamiento, el SAS podría disponer ya en Jaén capital de un flamante almacén en propiedad. ¿Dónde está el ahorro y la eficacia? Viernes, 23, 12 h., Aula Magna de la UJA, Acto del Día de Andalucía en Jaén. Banderas verdiblancas del cambio aparejado. Recambios ideologizados. O sea, Clavero Arévalo por Blas Infante, José Manuel Soto por Carlos Cano… La nueva Andalucía, con las ideas muy claras –“Ni maleta ni mochila”-, que te mira directamente a los ojos. Tête-à-tête. De ti para mí. ¡Viva Andalucía libre... de cargas!