Aplican un tratamiento en la Plaza de las Batallas contra el picudo rojo

El plan de choque del Ayuntamiento de Jaén se centra en la endoterapia, que consiste en aportar una dosis pequeña de insecticida en la zona central del tronco

 Aplican un tratamiento en la Plaza de las Batallas contra el picudo rojo

Foto: EXTRA JAÉN

Plan de choque contra el picudo rojo.

La concejala de Medio Ambiente, Sostenibilidad y Agricultura y CEE, María del Carmen Angulo, ha informado del estado de las palmeras situadas en la plaza de las Batallas –frente a la Subdelegación del Gobierno-, tras las rachas de viento registradas la semana pasada en la capital.

Debido a esto se cayeron varias hojas de estas dos palmeras washingtonia de unos 23 metros por lo que desde la Concejalía de Medio Ambiente, y con la ayuda del servicio de Bomberos de Jaén, se procedió a la retirada de alguna más, “evitando así cualquier peligro que pueda suponer para la ciudadanía”, ha indicado María del Carmen Angulo.

La concejala ha explicado que para este trabajo “tuvimos que pedir ayuda a los bomberos de Jaén debido a la altura de estas palmeras, a las que solo se puede acceder a través del camión autoescala que tiene a su disposición este servicio”. De esta forma, y gracias a su ayuda y a la labor de los técnicos de la concejalía, se retiraron las hojas y “aprovechando la presencia de la autoescala, ya que de otra forma es prácticamente imposible acceder a la copa de la palmera, también se procedió a realizar un tratamiento de endoterapia contra el picudo rojo”.




Se trata de un “plan de choque” para hacer frente a este insecto y que se ha puesto en marcha, no solo en estas palmeras, si no en todos los ejemplares de los espacios públicos de Jaén “gracias al estudio de riesgo del arbolado en el que se le da un tratamiento especial y específico a cada una de las especies que hay en nuestro parques y jardines”, ha concretado Angulo.

Según los expertos en la materia, la endoterapia es el tratamiento más efectivo para eliminar o prevenir el picudo rojo. Se trata de una técnica muy limpia y segura con el medio ambiente. Consiste en aportar una dosis muy pequeña de insecticida en la zona central del tronco. Los haces vasculares trasladan el producto al cogollo dónde se encuentra la yema apical y, de esta forma, las larvas mueren al ingerir el insecticida que circula por la savia de la palmera tratada.