El Consejo Consultivo declara nulos los convenios de abastecimiento de agua

Son convenios de anteriores mandatos, que incrementaron su coste un 310% y generaron un desajuste de 38 millones de euros al Ayuntamiento

 Consejo Consultivo Contratos

Foto: EXTRA JAÉN

Julio Millán y Francisco Lechuga en la comparecencia.

El alcalde de Jaén, Julio Millán, ha informado de que el Consejo Consultivo de Andalucía ha dado la razón al Ayuntamiento de Jaén y ha dictaminado como nulos tres acuerdos "manifiestamente improcedentes que cambiaban notablemente las condiciones del contrato de prestación del servicio de abastecimiento y saneamiento de agua para la ciudad de Jaén durante los anteriores mandatos", acuerdos que han supuesto un quebranto para las arcas municipales que rondan los 38 millones de euros pero que podrían alcanzar hasta los 60.


Millán, que ha comparecido en rueda de prensa con el concejal de Servicios Municipales, Francisco Lechuga, señala que los dictámenes del Consultivo, preceptivos y vinculantes para el Ayuntamiento, se centran en tres convenios de los años 2006, 2010 y 2013, el último de los cuales, firmado por el alcalde popular José Enrique Fernández de Moya, supuso que se alterase el interés que el Ayuntamiento soportaba por la prestación del servicio a la ciudad por parte de la empresa Aqualia del Mibor - 0,5 al 5,5%.



“Es una modificación muy grave de las condiciones de un contrato por un órgano, en este caso un alcalde, manifiestamente incompetente para ello”, recuerda.

Asimismo, Lechuga ha recordado que el contrato se firmó en la etapa del PP en los años 90, por 30 años con capacidad para llegar hasta los 75, y dio paso a la privatización de un servicio que era municipal y que prestaba en su momento Seragua.


Ambos han recordado que el servicio a la ciudad se incrementó con todos estos acuerdos declarados nulos un 310%, pasando el coste unitario por metro cúbico de los 0,6 euros a 2,5 euros/m3. Con ello, se paga el canon local más caro de toda Andalucía.

Millán adelanta  que va a trabajar para recuperar ese dinero, "que debería haberse destinado a servicios y obras para la ciudad de Jaén, a la que en lugar de compensarse con intervenciones en el abastecimiento y saneamiento de sus calles haya tenido que pagar incluso hasta un millón de euros en subvenciones extra más de lo que ya nos costaba el servicio cada año por acuerdos tan lesivos como este”, señala.

Se ha puesto de manifiesto "cómo no se ha respetado el interés general en la contratación de obras y servicios en la ciudad, una cuestión a la que ya se ha puesto freno con una gestión inmaculada de los contratos".

Era una "forma recurrente de gestionar la que había en los mandatos del PP", ha dicho, señalando el caso 'Matinsreg', con "dos concejales del PP condenados y 4 millones de euros del dinero del Ayuntamiento entregados a empresas, desde Mantenimiento Urbano, con obras en sede judicial con importes cuestionables y trabajos de difícil justificación; el expediente de nulidad con la empresa de autobuses Castillo, que demostraba que estaba sin contrato desde 1961 o como desgraciadamente se ha visto con los aparcamientos municipales ruinosos como el Avenida, cuyas plazas se vendieron el su día al 50% de su coste real”, relata el regidor.

En cuanto a los acuerdos declarados nulos por el Consultivo del contrato de suministro y abastecimiento de agua de la ciudad, Francisco Lechuga señala que la primera medida que tomó el equipo de gobierno fue frenar la subida recogida en el coste unitario por metro cúbico que la empresa cobraba al Ayuntamiento y revisarlo desde el comienzo de este mandato para 2019, 2020 y 2021, lo que ha supuesto que el Ayuntamiento no tenga que abonar casi cuatro millones de euros por este concepto y sí pedir su compensación en obras a la empresa.

Con respecto al acuerdo cerrado en 2010, el dictamen del consulto declara la nulidad del convenio del pago de deuda y permitirá revisar los intereses cobrados en demasía.

Estas dos medidas suponen un ajuste de casi 14 millones de euros a los que se suman los 24 millones de sobrecostes que se han detectado de los acuerdos firmados en 2006 y 2013, los que elevaron entre otras cosas el tipo de interés que se soportaba a cambio de unas obras de mejora que no compensaban en absoluto los gastos que suponían al Ayuntamiento ambos acuerdos.

Lechuga ha señalado que las medidas tomadas en estos tres acuerdos desangraban económicamente al Ayuntamiento.

Millán y Lechuga señalan que el interés del Consistorio es llegar a un acuerdo con la empresa, sin descartar otras vías para reclamarlos como para gestionar el servicio, de tal manera que se pueda cerrar una deuda generada para el Ayuntamiento que no le correspondía haber soportado y mediante la compensación en obras muy necesarias de saneamiento especialmente para la ciudad a través de un plan director en el que el Ayuntamiento pueda licitar en libre concurrencia estas intervenciones, algo que tampoco permitían estos acuerdos invalidados por el Consultivo.