Juzgado por abuso sexual a su prima cuando ésta tenía diez años
El Ministerio Fiscal le reclama seis años de prisión como presunto a autor de un delito de abuso sexual a menor de edad, agravado por el parentesco
Foto: EXTRA JAÉN
Imagen del acusado durante el juicio
La Sección Segunda de la Audiencia de Jaén ha juzgado a un hombre de 31 años acusado de abusar sexualmente de su prima cuando esta tenía 10 años y él 25. Por estos hechos, el Ministerio Fiscal le reclama seis años de prisión como presunto a autor de un delito de abuso sexual a menor de edad, agravado por el parentesco.
Además de la pena de prisión, la fiscal ha solicitado también que se le impongan diez años de prohibición de comunicación y aproximación a la víctima, además de ocho años de libertad vigilada. En concepto de responsabilidad civil, se pide indemnizar a la menor en 3.000 euros por los daños ocasionados.
Según ha relatado la víctima por videoconferencia, los hechos tuvieron lugar en el domicilio de su abuela, en Campillo del Río (Jaén), al que la menor solía ir con frecuencia. En el momento de los hechos, la menor, que no ha sabido concretar la fecha exacta en la que ocurrieron, tenían 10 años y su primo 25 años.
La menor ha declarado que fue en 2016, en un momento en el que colocaba sus cosas en una habitación de casa de su abuela, cuando el acusado se abalanzó sobre ella, le sujetó las manos y con la otra comenzó a tocarla mientras la besaba en el cuello. La joven, ahora con 16 años, ha dicho que no sabe cómo pero logró soltarse y salió corriendo hacia donde estaba su abuela, aunque en ese momento no contó nada porque "tenía miedo".
Ha añadido ante el tribunal que su primo la amenazó con "matar" a las personas que ella más quería si contaba lo sucedido por lo que optó por el silencio. Cuatro años tardó en contar lo que supuestamente le había pasado. Se lo contó primero a sus amigas y después a un profesor de su instituto que fue el que finalmente avisó a la madre, que acabará interponiendo la denuncia en diciembre de 2020.
La madre ha declarado como testigo y ha señalado que su hija ha precisado asistencia psicológica y que su comportamiento y rendimiento escolar se han visto afectados.
La defensa de la menor se ha sumado a la calificación del Ministerio Fiscal, pero le ha sumado dos años más por un delito de amenazas, mientras que la defensa ha abogado por la libre absolución ya que el acusado, en todo momento, ha negado los hechos.