Victoria épica y titánica del Real Jaén ante el Atlético Antoniano

El Real Jaén sigue suscrito a la épica más absoluta. El conjunto jiennense logró este domingo la primera victoria de la temporada en un final de película, con un hombre menos durante más de media hora y remontando ante un Atlético Antoniano que tenía el triunfo en su mano. La entrada de Pablo García revolucionó y el gol en el último suspiro de Alberto Bernardo brindan la primera gran alegría del curso a la parroquia jiennense (2-3).

El Real Jaén viajaba a Sevilla con cierta urgencia, pese a solo ser la tercera jornada liguera. Buenas sensaciones en las primeras dos pruebas de la temporada, pero un solo punto que parecía insuficiente. Este domingo, ante el Atlético Antoniano, equipo ya con experiencia en la categoría, el conjunto jiennense tenía ante sí una oportunidad para dar un golpe sobre la mesa, el primero de la temporada.

Manolo Herrero introdujo algunas novedades en el once titular, con la presencia de Nacho Vizcaíno o Sergio Rivera. Minutos antes del duelo, el Real Jaén informó de que Óscar Lozano, buque insignia lagarto, no viajaba a Sevilla al sufrir una pequeña lesión en el entrenamiento previo del sábado. A la espera de pruebas, el atacante motrileño causaba baja.

El encuentro tuvo de todo ya desde el primer instante. Ritmo frenético, ocasiones y dos equipos que proponían un juego ofensivo. Pana, ariete local, probó fortuna en la primera acción, pero su remate no cogió puerta. Respondió minutos después Mauro, de la partida este domingo, con un cabezazo que se marchó cerca de la meta sevillana. El partido daba poca tregua y la intensidad era máxima. El Atlético Antoniano aprovechó su primera gran oportunidad tras un despiste de la zaga jiennense, con su delantero Pana que batió por bajo a Rabanillo. Por suerte, respondió rápidamente un Real Jaén que estaba firmando una primera parte notable. Otro error defensivo, esta vez de los locales, dejó solo a Agus Alonso, que cedió a Mario Martos para que este pusiera el empate con una definición perfecta.

Dos errores que propiciaron los dos tantos, en una primera parte igualada y en la que el Real Jaén volvió a mostrar, como en las dos primeras jornadas, que su propuesta futbolística es interesante. Arrancó la segunda mitad y el equipo de Manolo Herrero comenzó muy enchufado. Y lo hizo además con dos cambios: Manu López y Pedro Fernández. En una de las primeras intentonas, David Serrano se internaba en el área local, y regaló el gol a un Sergio Rivera que de manera casi incompresible mandó el balón a las nubes. La parroquia jiennense se llevaba las manos a la cabeza ante esa ocasión clarísima.

Contestó también por partida doble el Antoniano, pero Rabanillo sacó dos pies vitales para salvar el segundo de los locales. Pero el Real Jaén seguía muy bien plantado y sumando oportunidades. Una más de cabeza, en esta ocasión de Pedro Fernández, pero que sacó el guardameta local bajo palos.

De nuevo, el fútbol volvía a ser injusto con el Real Jaén. Tras merecer mejor suerte, Pablo Rojas ponía el 2-1 con una volea a bote pronto. Para colmo, minutos después veía roja directa Agus Alonso por una presunta agresión a un zaguero local. El partido, que lo tuvo el Real Jaén en su mano, se ponía muy cuesta arriba. Error grave del delantero lagarto, que dejaba a su equipo con uno menos durante 25 minutos.

Final épico

Sin embargo, el conjunto jiennense no se rindió. Entró Pablo García en el ariete, y revolucionó el partido. Él mismo se sacó de la manga un penalti que convirtió a las mil maravillas para poner de nuevo el empate en el marcador. El final del encuentro fue duro, pero el Real Jaén supo resistir con un hombre menos ante la insistencia del Atlético Antoniano. Resistió de tal manera que el destino le tenía preparado un grandísimo botín.

En una de las últimas jugadas del choque, Alberto Bernardo recogió un balón en la esquina del área pequeña, y se sacó de la manga un remate cruzado que dejó en silencio al Municipal de Lebrija. Golazo épico para sellar una remontada absolutamente titánica de un Real Jaén que lograba así su primera victoria de la temporada. Fue tan épica que en la última jugada del duelo, y tras un balón a la olla de los locales, Rabanillo se tomó el lujo de hacer otro paradón para ya sí que sí, finiquitar el partido. Tres puntos fundamentales que aúpan al conjunto jiennense hasta las posiciones medias de la tabla. La próxima semana, el Real Jaén recibirá en casa al Xerez Deportivo, con el chute de confianza que deja el triunfazo de este domingo.