Siempre he pensado que, en los años preelectorales, los presupuestos generales del estado dan cumplida cuenta a los más justos deseos de los territorios olvidados, ahora llamados vaciados.
Pero no, Jaén no existe, y hablo, por ejemplo, de la nacional 322, también llamada A32 y por todos conocida como la carretera de Bailen a Albacete, una de esas grandes obras promesa electoral de toda la vida, gobierne quien gobierne, en Madrid o en Sevilla.
Y a lo escrito me atengo, que las palabras se las lleva el viento. Los Presupuestos Generales del Estado - PGE 2023 recogen diferentes partidas para sus tramos, 6,6 millones para Torreperogil - Villacarrillo (ya inaugurado), 9,3 millones al de Villacarrillo – Villanueva del Arzobispo (apertura prevista para finales de 2022), 3,7 millones a Villanueva del Arzobispo - Arroyo del Ojanco y dos partidas de 500 mil para los dos tramos restantes al límite de Albacete. En mi humilde opinión, poco muy poco dinero.
Me queda recordar que su primer tramo, hasta Linares, se encuentra en servicio desde 1996, hace 27 años. Que hasta Torreperogil no se llegó hasta el 2019 y que se desea que a finales del 2022 llegue hasta Villanueva del Arzobispo, pero que hasta Albacete aún nos quedan 2 horas de camino.
Pero Jaén no es todo en la A-32, hablamos de una vía vertebradora de Andalucía y Castilla la Mancha en sus comunicaciones con el levante, y esta capacidad la adquirirá cuando esté totalmente finalizada, y si poco se apuesta por el lado de Jaén menos se hace por el lado de Albacete. Apenas algo más de 6 millones para el tramo Albacete – Balazote, y diversas partidas de 500.000 euros para el resto de los tramos, apenas para estudios.
En resumen, que en 2023 poca obra nueva vamos a ver.
Pero hasta aquí las malas noticias, las buenas es que los PGE hacen una proyección de gasto de 146 millones para las anualidades 24, 25 y 26, por Albacete, si el gobierno de Madrid entiende proyección como compromiso bien, si la entiende como predicción, la A-32 no existe.
Si queremos frenar el despoblamiento y abordar políticas reales sobre la España vaciada, que el interior exista, es necesario decisión política y apuestas reales, no proyectos a cien años.
Es muy difícil creer en palabras optimistas, cuando Jaén tiene el lamentable “honor” de ocupar el puesto 51 de 52 en la inversión por habitante en los PGE, con 110 euros, y cuando las ayudas extraordinarias, como a Teruel o Soria, no se acercan a nuestras tierras.
No se si será, porque Soria Ya y Teruel Existe, es la única forma de hacer ver a los políticos, de la verdadera existencia de los problemas de la ciudadanía necesitada.