Hoy, 17 de octubre de 2022, se celebra el Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, con el propósito de promover mayor conciencia sobre las necesidades para erradicar la pobreza y la indigencia en todos los países.
Desgraciadamente, aún existen millones de personas que sufren la carencia de recursos necesarios para satisfacer sus necesidades básicas. Esta circunstancia se plasma en la falta de salud, de vivienda, de ingresos, de empleo, de nutrición, de tecnología, de educación y de viabilidad económica.
Es un día para alzar las voces en todo el mundo, a fin de que la comunidad internacional tome conciencia y tome cartas en el asunto respecto del problema que aqueja a todos estos hombres, mujeres y niños que padecen el terrible acoso del hambre y las enfermedades.
Con datos concretos, se demuestra que hay muchos andaluces y sobre todo andaluzas que siguen pasando dificultades económicas para vivir, ya que más de 357.000 andaluces se benefician del Ingreso Mínimo Vital desde su puesta en marcha en junio de 2020, de los que el 43% son menores.
Además del total de hogares beneficiarios en Andalucía, un total de 72.135 también lo son, del complemento de ayuda para la infancia, una ayuda que entró en vigor el pasado 1 de enero
Otro dato alarmante, es que uno de cada diez andaluces acumula una serie de problemas que van desde no poder permitirse mantener un automóvil a no tener recursos para afrontar gastos imprevistos o comer carne, pollo o pescado cada dos días.
Además, el porcentaje de personas que no puede mantener su hogar a la temperatura adecuada, ha pasado de un 11,3% a un 18%, no pueden permitirse poner el aire acondicionado en verano o calefacción en invierno.
Otra información bastante preocupante es que más del 18% de los andaluces y andaluzas que trabajan, se encuentran en situación de pobreza en el trabajo, siendo España el tercer país de la UE, por detrás de Rumanía y Grecia, con mayor tasa de pobreza laboral, que afecta mayoritariamente a mujeres consecuencia directa de la precariedad, la baja remuneración y un modelo de crecimiento desigual.
Este año, la conmemoración del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza sigue siendo de vital importancia, la pobreza sigue por desgracia extendiéndose.
Por este motivo hoy es el día de alzar nuestras voces y exigir una solución de una vez por todas volvemos a reivindicar la necesidad de realizar reformas en profundidad, tanto por el Gobierno Central, como por las CCAA.
Además en Andalucía que la situación es más agravante, ya que se que nuestra renta autónoma ha quedada suspendida, dejando sin cobertura a muchas personas, reivindicando desde aquí que la Junta de Andalucía debe dar respuesta inmediata.
Sigue siendo una realidad, el hecho de que tener empleo no asegure unas condiciones de vida óptimas, ya que muchas de las personas trabajadoras asalariadas andaluzas siguen sin llegar a final de mes, al tener unos empleos muy precarios, Y en el caso de las mujeres se acentúa este sueldo bajo aún más el salario medio anual de las andaluzas, fue de poco más de 18.600, percibiendo en numerosos casos, unos 6.000 euros anuales menos que los hombres.
En definitiva, en este día, manifestamos que las ayudas de protección social no son suficientes, hay que afrontar urgentemente acciones para proteger los derechos de las personas, a una vivienda digna, a la educación, a la sanidad y a un nivel de vida adecuado.
La vivienda sigue siendo un hándicap, ya que para muchas personas sigue siendo inaccesible Y que hay muchos hogares que no pueden cubrir los gastos de educación para sus hijos, y siguen existiendo muchos problemas burocráticos para el acceso a la sanidad con bajos ingresos e inmigrantes recientes.
Ante este panorama, aprovechamos para seguir reivindicando nuestra lucha contra la pobreza, y la exclusión social, por esto, exigimos que se lleven a cabo las medidas concretas y eficaces contra esta desigualdad, el fortalecimiento de los servicios sociales.
Nuestra principal reivindicación, se resume con la idea concreta que solo podemos acabar con este grave problema social, si situamos a las personas por encima de los intereses económicos.
En definitiva, todos y todas debemos trabajar para "poner fin a la pobreza en todas sus formas y en todo el mundo".
