Mediodía en la provincia de Jaén

Manuel Barneo

Legado

La opinión de Manuel Barneo


Aquí, nos encontramos de vuelta de las vacaciones Semana Santa, descansados unos, otros
cansados de clientes de turistas. Retornamos a los problemas cotidianos de la astenia
primaveral, de falta de sueño, de escasez de lluvias, del calor excesivo.

Dijo Fernando Pessoa que “Los viajes son los viajeros. Lo que vemos no es lo que vemos, sino lo
que somos”. Nos enmarcamos en un compendio de ideas preconcebidas, en paradigmas
establecidos, que nos hacen más fácil el día a día. Basándonos en la sociedad “protectora”, y
ahora aún más en la inteligencia artificial que saca conclusiones por nosotros, que desarrolla el
ChatGTP. Ya no tenemos que pensar, todo está a la distancia de un click. Con una sencilla
pregunta a esta herramienta podemos saber todo lo divino y humano de los grandes datos y lo
escrito en la red.



Sin embargo, seguimos siendo fruto del legado de nuestros mayores, de los que nos
precedieron, de aquellos con los que queremos romper. De los que denostamos por los cambios
del entorno online, como si fuéramos a inventar “la penicilina”.

Si nos hiciéramos estas preguntas: ¿Esta noche he dormido en un colchón?¿Cómo más de dos
veces al día?¿Tengo agua potable?¿Tengo electrodomésticos que me ayudan en el día a día?
¿Tengo acceso a medicamentos? Si la respuesta es que sí a todo, somos afortunados.
Pero nuestra naturaleza nos empuja a pedir más, a cruzar nuevos mares, a descubrir nuevos
puertos, a ser rupturistas con el pasado. Pero ¿hacia dónde vamos?¿Este es el camino que
debemos tomar? Debemos de dar solución a este nudo gordiano. Pero sobre todo desde la
razón. No desde el escepticismo de las sombras interesadas de la sociedad (las redes, que nos
atrapan cual pescado), sino desde las luces de la inteligencia y la verdad. Por esto amigas amigos
os invito a pensar, y ser más autocríticos. Sed felices.