Este fin de semana en el programa "Al cielo con ella" de la humorista Henar Álvarez hemos podido escuchar a dos mujeres increíbles que han luchado mucho por los derechos de las mujeres en este país, cuando de verdad te jugabas muchas cosas: Paquita Sauquillo y Cristina Almeida.
Escucharlas hablar, además de un privilegio, es una verdadera toma de conciencia. Se acaban de cumplir 50 años de la ley de igualdad jurídica entre hombres y mujeres en España, parece increíble que mi madre, hasta los 30 años, no haya podido disfrutar de esos derechos que a mi ahora, me parecen indispensables.
Ahora tenemos que avanzar un poco más y plantearnos cuando vamos a hacer uso de nuestros derechos sexuales, cuando las mujeres vamos a tomar conciencia de nuestra responsabilidad sexual y nos vamos a hacer dueñas de nuestro cuerpo y de nuestro placer dejando atrás, tanto los efectos que arrastran de esa época oscura sin derechos en España las mujeres maduras, como el impacto en la sexualidad de nuestras adolescentes de la ausencia de educación sexual y de información fiable.
Los 15 años que llevo haciendo talleres por toda la provincia y en mi consulta me han hecho comprobar cuánto camino nos queda por recorrer en ese aspecto. Estos años, además de proporcionarme una radiografía muy nítida de dónde estamos como sociedad en derechos sexuales, me han permitido escuchar historias sorprendentes de sufrimiento asociado a la sexualidad en mujeres de todas las edades. Vamos a dejar de desear cumplir las expectativas que nuestras parejas traen a las relaciones, vamos a dejar de esperar disfrutar como a los demás les gustaría, vamos a dejar de ser meros objetos al servicio de la sexualidad masculina.
Como dice la canción de Manuel Carrasco “Un pasito más, que sí se puede” vamos a acercarnos a nuestra sexualidad sin complejos, dueñas de nuestros cuerpos maravillosos, vamos a descubrir la inmensa capacidad que estos tienen para el placer. En definitiva vamos a responsabilizarnos de nuestra sexualidad y a disfrutadla como cada una de nosotras decida.
Un pasito más, que si se puede, mujeres valientes.