Seguro que en algún momento de tu vida haciendo zapping en Eurosport o Teledeporte has podido ver durante algunos segundos saltos de caballos. Jinetes y amazonas elegantemente vestidos de etiqueta con guantes y casco en sintonía, y te has preguntado: ¿de verdad esto es un deporte? Pues sí, y nada menos que olímpico desde 1912 en los JJ.OO. de Estocolmo. La disciplina de Saltos de Obstáculos es la más popular y moderna del deporte ecuestre, disciplina en la que Wistremundo de Loma-Ossorio Mata (Jaén 2004), compite a nivel nacional.
Wistre, como cariñosamente le llaman sus amigos y familiares, posee el nivel de Galope 7, máximo nivel otorgado por la R.F.H.E. (Real Federación Hípica Española). Suele competir por distintas zonas de Andalucía y Murcia donde se celebran dos ligas y un campeonato nacional cada temporada. Recalando frecuentemente en Antequera, donde entrena para competir con su yegua Ipet LB. Yegua que aparte de todos los triunfos con Wistre, tiene una medalla de Oro en el Campeonato de Andalucía con su hermana María.
A diferencia de otros deportes para poder montar a diario, el binomio (caballo y jinete) deben estar conectados para exigirse físicamente lo planificado por su profesora Inma y su entrenador José María, su padre. Gran jinete y varias veces campeón del Concurso Hípico de Jaén. En la actualidad es Delegado Federativo y Diseñador de Recorridos. Donde cada año hace de jefe de pista en el Concurso Nacional de Saltos de Baeza. Con este bagaje no es de extrañar que la pasión por este mundo haya sido transmitida por su familia.
El salto ecuestre no solo exige habilidades técnicas. La comunicación es clave; el lenguaje no verbal, con apenas pequeños movimientos, el jinete guía al caballo para encontrar el mejor impulso y la trayectoria ideal hacia el siguiente obstáculo. Las maniobras para superar vallas, muros y fosos con elegancia y determinación.
En cada competición, la tensión y la emoción alcanzan su punto máximo en el último salto. Un recorrido limpio puede asegurar la victoria, pero cualquier error puede costar el título. Con su combinación de velocidad, precisión y belleza, consolidándose como una de las disciplinas más emocionantes de la equitación.
Desde el primer momento que me puse en contacto con Wistre, percibí que era alguien especial: amable, sensible, cercano y esto se ha corroborado con este articulo el cual me ha ayudado a entender su trayectoria.
Reconozco abiertamente que, si bien conocía el mundo del caballo por el amor incondicional que tiene la pintora Elena Yáñez (mi esposa). La dificultad intrínseca de la disciplina del salto ha sido toda una revelación.
Wistre estudia ingeniería Eléctrica en la UJA, en función de las exigencias del grado y las competiciones, administra su tiempo eficazmente semana a semana. Para ser seleccionado en las grandes competiciones es determinante la regularidad y una buena clasificación a lo largo de la temporada, tanto por equipos como individualmente. Luego la R.F.H.E. valora la inclusión individual y por equipos en los diversos campeonatos.
Despertar interés en futbol, en atletismo, en tenis es algo normal, pero encontrar deportistas en Saltos Ecuestre o Doma Clásica es muy complicado. Wistremundo de Loma-Ossorio es sin duda uno de los grandes nombres del mundo ecuestre jiennense. Su carrera deportiva y su empuje personal demuestra que con esfuerzo y persistencia se llegs lejos. Un deporte que invita a disfrutar de la naturaleza mientras se practica y hacerlo siempre con un compañero que nunca defrauda: el caballo.
Jaén nunca rindió luto por la desaparición del Concurso de Saltos que se celebraba desde 1942, hasta su desaparición a principios de este siglo. Llegando a ser uno de los más antiguos de España. Se realizaba en el foso de la Alameda en el Club Hípico, donde cada año los jiennenses teníamos la oportunidad de disfrutar del evento antes de bajar a la feria de San Lucas.
https://webjaen.wordpress.com/2008/09/01/un-poco-de-historia-de-jaen-la-creacion-del-club-hipico/