El infierno en la tierra tiene nombre y lugar y no es otro que Gaza; ese pequeño territorio palestino que ve como su mayor enemigo, Israel, está arrasando con todo dejando tras de sí una estela insoportable de impunidad, soberbia y muerte. Y en este dantesco escenario resiste una población civil asediada por uno de los ejércitos más poderosos de la tierra ante la pasividad pasmosa de la comunidad internacional, la única que tienen en sus manos la fuerza y el poder para poner fin a semejante barbarie. Han transcurrido más de doscientos días desde que Israel lanzara su ofensiva sobre Gaza en represalia por la matanza de 1.200 personas el 7 de octubre de 2023. La venganza ha sido implacable y trágica. La ofensiva de Netanyahu para acabar con Hamás, autora de esa masacre, ha causado ya más de 34.000 palestinos muertos, entre ellos 14.685 niños (cada 10 minutos muere o resulta herido un niño) y 9.670 mujeres, según la Oficina del Alto Comisionado, que cita a las autoridades sanitarias del enclave. Otros 77.084 han resultado heridos y se supone que hay más de 7.000 desaparecidos bajo las ruinas de los edificios. Las imágenes que nos sacuden a diario son el retrato descarnado del día a día de los gazatíes. Imágenes que requieren ser vistas más de una vez para hacernos a la idea de la magnitud y el sufrimiento de la población. Imágenes que nos ofrecen un dolor insoportable de quienes llevan más de doscientos días sobreviviendo bajo las bombas y con el miedo metido en el cuerpo; los niños llevan meses sin ir a la escuela: sus colegios y universidades han quedado destruidos, al igual que sus esperanzas de futuro. No hay palabras para describir lo que está pasando en medio de la hambruna y las exhumaciones de fosas comunes dejadas por los soldados israelíes. La Franja de Gaza es literalmente un inmenso cementerio. Más de 10.000 mujeres han sido asesinadas en Gaza, entre ellas 6.000 madres que han dejado atrás a 19.000 niños huérfanos, según un informe de la Organización de Derechos de las Mujeres de ONU. Es el desgarrador recuento de número de víctimas del genocidio israelí; pero las atrocidades continúan: asesinatos despiadados, arrestos arbitrarios y devastación y todo ello sucede ante la indiferencia de la comunidad internacional incapaz de parar de una vez la destrucción y el asesinato en masa.
Antonia Merino
Con perspectiva sureñaGaza, el infierno de Israel
La ofensiva de Netanyahu para acabar con Hamás, autora de esa masacre, ha causado ya más de 34.000 palestinos muertos