Me lo han cambiado
Hay un nuevo hombre: “el homo tediens” (perdónenme el neologismo) que en su ocio se retrepa en su sofá con su terminal y hala, a arreglar España
El blog de Carlos Oya. Aprendiz de todo y maestro de nada, aunque se gane la vida siendo profesor de Historia y disciplinas adláteres en Pegalajar, así que para el Trivial, siempre en tu equipo. Emborronador de cuartillas y rascatripas en una banda de rock a tiempo parcial. La gente suele confundir su timidez con cierta antipatía y al revés. Molesto a derecha, izquierda, norte y sur, siempre dispuesto a dar la matraca.
Hay un nuevo hombre: “el homo tediens” (perdónenme el neologismo) que en su ocio se retrepa en su sofá con su terminal y hala, a arreglar España
Respetando toda clase de gustos, faltaría más, partamos de la premisa “donde hay pelo hay alegría”
Las navidades se han convertido en unas fiestas en honor del pecado capital de la gula
“Después de eso esto” y es el enunciado de una falacia
El tiempo se estira como un chicle pegajoso entre Dyc Pepsi y Dyc Pepsi
Siempre se puede tirar de oficio y lograr una columna al uso con la enésima estupidez de nuestra élites políticas
Las citas eruditas o cultas son una opción y si uno se pasa de frenada puede llegar a la pedantería
Visto lo visto creo que el P.S.O.E. se debería rebautizar como Partido Sofista Obrero