El arpa de Dorotea

Juan Manuel Vallecillo

Asesinos del amor: El timo del punk

Ahora, durante esta época en la que estamos siendo testigos de que el amor se muere, a veces, quizá resistiéndome a esta evidencia, me gusta recopilar....

 Asesinos del amor: El timo del punk

Foto: Tu perro salvaje.

Asesinos del amor.


Ahora, durante esta época en la que estamos siendo testigos de que el amor se muere, a veces, quizá resistiéndome a esta evidencia, me gusta recopilar historias de cuando estuvo vivo. Todos relacionamos al científico Graham Bell con el teléfono pero pocos saben que invirtió más tiempo y dinero en sus experimentos para la invención de los primeros audífonos. Se involucró en una lucha constante contra ese cruel silencio que tanto margina. Esto se debió a que su amada esposa, Mabel Hubbard, era sorda y, aunque la comunicación entre ellos fue fluida gracias al lenguaje de signos, él se empeñaba en conseguirle una vida sin limitaciones. Sí, el amor, para bien o para mal, implica ciertos sacrificios que se oponen a esta actual corriente de mal llamada libertad por la que tenemos que hacer siempre lo que nos venga en gana. También Mabel le correspondía en este sentido y tuvo la culpa de que el científico pudiera acudir a la Exposición Universal de Filadelfia donde mostró el prototipo de un teléfono que le volvió rico y famoso. Ante la imposibilidad de viajar los dos juntos, Bell rechazaba de plano la idea de dejarla tanto tiempo sola y, entonces, en secreto, su esposa compró el billete de tren, hizo la maleta de Graham y lo llevó por sorpresa a la estación. El científico protestaba pero ella gesticuló un rotundo “déjame” y, luego, se dio la vuelta para no ver qué decía su marido. No obstante, por desgracia, 46 años después tuvo que expresar justo lo contrario. Él estaba muriendo en la cama y ella le soltó las manos un momento para, entre lágrimas, poder articular un “no me dejes”. Graham, mirándola con dulzura, solo contestó un “no” con el que se fraguó la más silenciosa y hermosa despedida.

“Despedida” es el último single que adelantó la banda jiennense “Asesinos del amor” para su primer álbum “El timo del punk” lanzado el pasado viernes 23 de septiembre. Frente al carácter pegadizo y desenfadado de sus dos primeros adelantos, se trata de una canción potente en la que el suspense se convierte en rabia. Viene, además, junto a un video clip bastante chulo realizado por “Secuencia 4k”. A continuación, el tema casi homónimo al nombre del grupo, “Asesino del amor”, es el que marca, sin duda, cuál es el estilo de este proyecto: un punk español y ochentero en la línea de “Los Romeos” o “Aerolíneas federales” con originales arreglos que lo convierten en fresco y novedoso. “Nuevo día”, en mi opinión, es el corte más contagioso del disco. Una buena melodía de esas que pueden bailarse haciendo el gamba y, sin embargo, quedas bien. Por último, “Suicidio” es la canción más diferente, la que, por tono y contenido, no se esperaba. Ahí, la vocalista Indi le da un aire a Alaska y, Miguel Reche, el bajista, adquiere más protagonismo por su original línea de bajo llevando el ritmo del tema. En todo el álbum, destaca la sabiduría de JuantoPop a la batería y, sobre todo, los peculiares toques guitarreros de Rubén Rocker que, sin excentricidades, consigue ornamentar todos los temas hasta hacerlos más creativos y sugerentes.



Este trabajo discográfico se completa con una interpretación a dúo de “Asesino del amor” a cargo de Indi y la cantante colombiana Allison García, diferentes adaptaciones más rocanroleras de las canciones mencionadas y una supuesta versión en directo que no llego a entender porque, en realidad, solo se recita la letra sobre un fondo de guitarra. Supongo que este corte es el responsable de que el álbum se llame “El timo del punk”.

Auténticos, divertidos y con un matiz de extravagancia, estoy seguro de que, para todos, será un placer convertirnos en los cómplices de estos “Asesinos del amor” precisamente ahora, durante esta época en la que estamos siendo testigos de que el amor se muere.