Mediodía en la provincia de Jaén

Juan Carlos Ruiz

Tardeo

Opinión de Juan Carlos Ruiz


Hace unos días llamaron a mi casa para realizarme una encuesta sobre mi percepción de la economía española. Me pillaron con el día tonto y decidí colaborar. Posteriormente me puse a investigar sobre los resultados para ver si mis opiniones coincidían con la de la mayoría de mis conciudadanos y efectivamente así era:

La mayoría de los españoles pensamos que nuestra economía familiar no va a cambiar sustancialmente en este año 2024, es decir, esperamos seguir ganando prácticamente lo mismo que en el 2023, sin embargo tenemos una opinión más negativa sobre la economía global del país. Pensamos que ésta va a ir peor que el año pasado.



Este dato, que parece anecdótico, resulta muy importante, porque ante la pregunta de si “¿piensa usted acometer un gasto o inversión importante para su familia en el presente año?: un piso, un coche, un gran electrodoméstico, etc”. la mayoría de los españoles contestan que prefieren postergar ese tipo de compras para otro ejercicio que se prevea más favorable.

Este hecho sí que puede contribuir de manera sustancial a la ralentización de la economía nacional. Por otro lado, resulta lógica esta respuesta, ya que si uno atiende a los informativos, no verá más que conflictos bélicos internacionales, inestabilidad y confrontación en la política nacional y por si fuera poco, dos ancianos con evidentes carencias en sus facultades mentales disputándose la presidencia de la mayor potencia mundial. No parece una perspectiva demasiado propicia para el despilfarro.

Sin embargo, este pesimismo parece no existir cuando uno pretende reservar una mesa para comer con los amigos un sábado o un domingo cualquiera, como no lo haga con la suficiente antelación, es probable que no encuentre un sitio donde sentarte y si además decide prolongar la salida tomándose una copa en alguno de los locales de moda, verá como éstos están abarrotados de gente de todas las edades y condiciones. No sé si esto pasa solo en Baeza, como destino preferencial del ocio en la provincia de Jaén, o es extensible al resto de localidades, pero tal vez la mejor forma de luchar contra el estancamiento de la economía sea la promoción del “tardeo”.