Tribuna

Plataforma Ciudadana en Defensa de la UJA

La Junta frena el grado de ingeniería biomédica en la UJA

Comunicado de la Plataforma Ciudadana en Defensa de la Universidad de Jaén

Una mala noticia para la Universidad de Jaén (UJA), que en este caso comparte con la de Granada (UGR), se trata de la negativa por parte de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación de la Junta de Andalucía, a que en el próximo curso académico pueda cursarse en la institución universitaria jiennense el nuevo Grado de Ingeniería Biomédica, que se iba a compartir con la Universidad de Granada. La situación creada provoca un serio contratiempo ya que por el momento en que se ha conocido la noticia, en este caso un pronunciamiento desfavorable por parte de la Agencia para la Calidad Científica y Universitaria de Andalucía (ACCUA), que depende de la Consejería citada, se actúa tarde y mal porque a estas alturas se frustran las expectativas de centenares de alumnos interesados en cursar esta disciplina y sus planes pasaban por iniciar el curso en el próximo mes de septiembre. Un jarro de agua fría a causa, como mínimo, de una mala gestión, pero de graves consecuencias para los alumnos a los que afecta, además de un decepcionante escenario para la propia Universidad, tan ilusionada con la incorporación de los nuevos grados, una de sus razones de ser, ver cómo crece la oferta y el número de estudiantes en nuestro Campus.

No puede entenderse que la evaluación presentada por las dos universidades públicas obtenga por respuesta un informe desfavorable al plan de estudios presentado, y menos aún que los argumentos que se esgrimen no se sustenten más que en razonamientos ambiguos, pero sobre todo que se agoten los plazos para tratar de dar por hecho un dictamen de parte, que en absoluto es compartido por la UJA ni por la UGR, que, como ha informado el rector de Jaén, Nicolás Ruiz, ya han presentado las correspondientes alegaciones ante el Consejo Andaluz de Universidades solicitando que con la máxima rapidez la Agencia evaluadora vuelva a pronunciarse y corrija una decisión tan imprudente, tomada a la ligera y causando a la Universidad un severo revés, pero particularmente a los alumnos interesados.

El propio rector ha dado información en un comunicado hecho público tras la reunión de su Consejo de Gobierno, de todo el procedimiento seguido y cómo en los plazos establecidos para ello la UJA atendió debidamente las sugerencias planteadas por los evaluadores. Es por tanto incomprensible que el órgano que tiene como responsable al propio consejero, José Carlos Gómez Villamandos, actúe de esta manera tan desproporcionada respecto a la UJA y la UGR, que no quisiéramos pensar que obedezca a una penalización por parte de la Consejería a la reivindicación permanente que desde Jaén se ha mantenido con respecto al problema sangrante de la financiación, en el que la Junta de Andalucía ha dejado tanto que desear, tanto es así que sigue siendo una asignatura pendiente tres años después.

A este respecto cabe indicar que sobre el acuerdo firmado en su día con la intervención del propio presidente de la Junta para el cumplimiento del modelo de financiación, tras la rebelión de los rectores en la víspera del Día de Andalucía, el avance es prácticamente inapreciable, a estas alturas ni siquiera se ha reunido la mesa técnica para ir a las concreciones, que fue uno de los primeros compromisos adquiridos, por lo que todo hace indicar que, una vez más, la Consejería de Universidades y la Junta han asumido compromisos que no están dispuestos a cumplir. Razón por la cual se lo estaremos recordando tantas veces como sea necesario porque los incumplimientos siguen causando serios perjuicios a la UJA y lastran sus planes de futuro 32 años después de la creación de la que toda la sociedad jiennense considera su más importante conquista social, para que a estas alturas se le siga negando lo que en justicia merece. No se sabe bien qué necesita la Junta y su Consejería de Universidades para ponerse manos a la obra, cumplir con lo firmado, resolver un conflicto de la que solo ella es responsable, y en definitiva no mantener por más tiempo un continuo e innecesario enfrentamiento con la UJA y con Jaén.