Es espeluznante ver cómo, tras la tragedia ocurrida en Valencia, hay personas que son incapaces de contener su odio. Desde el día siguiente a los estragos de la DANA, han aprovechado el mejor caldo de cultivo para dar rienda suelta al asco que sienten hacia todas aquellas personas que los quieren ver fuera de cualquier canal que utilizan para difundir su bilis. Mientras la mayoría lloraba por las personas fallecidas y desaparecidas, por las casas y negocios perdidos, esta mugre mediática trazó sus planes sin pudor ni humanidad. Y allí que se plantaron con sus mochilas repletas de basura y la única intención de propagar esa podredumbre que inunda sus vidas y mentes.
Son lo peor de este país, la parca, las tres hermanas de la mitología romana. Una hilaba, otra devanaba y la tercera cortaba el hilo de la vida. Eso es lo que esta gente hace con la verdad, la ilusión y la democracia: seccionarla en aras del caos. Porque es en el caos donde saben que pueden pescar algo llegado el momento. Ya tenemos un ejemplo claro de victoria entre sus filas. El líder supremo de SALF, cuyo nombre no reproduciré aquí, que igual aparece, como Bitelchus. Han esparcido su veneno, tirado sus anzuelos y miles han picado como moscas a la… Porque el hecho de que esta gentuza siga ahí, responde a que hay otros tantos que reproducen sus ictus en redes. Estas personas no están hechas para escuchar, sino para obedecer y ampliar la onda expansiva que mana de las bombas que lanzan desde sus altavoces.
Los bulos corrían desde el minuto uno y han encontrado su eco en los de siempre. Las redes ardían con sus vídeos, fotos y mensajes, gracias a que los ineptos de turno daban pábulo a lo que leían y escuchaban. Yo, que en mi entorno y redes tengo a personas de esta calaña, los he marcado con una X y colgado la etiqueta de «ni con un palo». Paso de esta gente, sean quienes sean, porque me han demostrado que no merecen mi respeto. Y, claro, la pregunta siempre vuelve. ¿Cómo es posible que cuezan dentro tantísimo odio cuando ni siquiera saben de lo que hablan? Por la calle son como tú, como yo, como cualquiera, pero si les sacas uno de los temas que alimenta su rencor es cuando descubres con quién estás derrochando saliva y tiempo. No merece la pena, así que no malgastéis más energía en intentar convencerlos. Son ciegos, sordos y mudos, justo lo que los propagadores de mentiras espurias necesitan, seguidores con cabezas vacías en las que los mensajes rebotan de lado a lado como la bola de un pinball.
Ver cómo miembros de grupos neonazis se organizan y aprovechan el dolor de los valencianos para atacar a tres instituciones del Estado, refleja con claridad lo que son: alborotadores, niñatos aburridos, sembradores de discordia. Es lo que hay. Quien se pregunte el porqué existen, que miren entre sus vecinos y amigos, o frente a un espejo, porque seguramente encuentren a los verdaderos culpables de su existencia. Bueno, también en sus familias, que con toda seguridad de casta le viene al galgo.
La impotencia de los vecinos ante la tardanza de las ayudas, quizá fuese el empujón que necesitaron para justificar las agresiones al Rey, al presidente del Gobierno y al de la Generalitat valenciana. Pero no, así no. En mi opinión, la visita no se debió producir. La gente solo pide buena coordinación y que se les auxilie cuanto antes. Pero no, la violencia no debe tener cabida jamás. Se puede gritar, reprochar, pero nunca agredir. Y a eso fueron los grupos organizados, sus crías, a sembrar violencia y odio, no a arrimar el hombro. Y quienes lo han hecho solo buscaban la foto para arremeter contra el contrincante político. Sí, exacto. Son los mismos que ahora piden la declaración del Estado de emergencia y que durante la pandemia llevaron a los tribunales al Gobierno por declarar el Estado de alarma. ¿Quién es el valiente que se lo explica a sus seguidores? ¿Se atreverán a decirles que fueron ellos los que pidieron eliminar la UME de Valencia? Pues eso, que no seré yo quien desperdicie mis fuerzas en hablarle a un montón de piedras.
Lo voy a decir por última vez. Todas aquellas personas que lean estas líneas, cosa que dudo, porque se informan en prensa y seudomedios y comunicadores, ventiladores de mierda y odio, les pido por favor que me borren de sus listas de amigos, tanto en el mundo virtual como en el real, y si se cruzan conmigo por la calle que no me saluden ni me hablen. Sabéis cómo soy y lo que espero de este mundo, algo que para nada se parece a vuestra visión. Si no me queda más remedio, porque soy así de estúpido, os sonreiré con toda mi falsedad y actuaré. Sí, lo sé. Promulgo una cosa y confieso la contraria. Qué le vamos a hacer. En mi casa me enseñaron que hay que morderse la lengua en muchas ocasiones. Todos los padres cometen fallos en la crianza.
Lo siento por mis padres y todo el trabajo duro que hicieron conmigo en este aspecto. No pienso seguir sus consejos cuando de esta gente se trata. Sois todo lo contrario a mi añorado El Dorado. La meta que persigo en mi vida personal no está manchada de personas como vosotros y vosotras.
Así que ya sabéis. Hacedme, haceos a vosotros mismos ese favor y limpiad por mí la parte de era que compartimos y aliviad mi carga, que mi cadera y mi forma de ver la vida no puede más con tanta cabeza vacía ni con personas que no distinguen la verdad de la mentira.
Antonio Reyes
El bar de la esquinaHacedme un favor
Mi forma de ver la vida no puede más con tanta cabeza vacía ni con personas que no distinguen la verdad de la mentira