La implantación de nuevas peatonalizaciones, la priorización del transporte colectivo sobre el individual, las zonas de bajas emisiones… son temas de máxima actualidad que ya entran en las conversaciones habituales entre los vecinos de nuestra ciudad. Atrás quedaron los tiempos donde a los que hablábamos de movilidad sostenible se nos acusaba de cochófobos o incluso nos tildaban de liberticidas, claro que esto es fruto del liberalismo cortijero que practica la derecha española. Nunca podré entender como libertad, hacer lo que te dé la gana, pues ello por lógica va contra cualquier convivencia.
El problema lo tenemos ahora al pretender acotar los cambios estrictamente a la ciudad, a los cascos históricos. La escala territorial de los cambios deben ser a escala metropolitana o serán inútiles, solo serían puro teatro. No pueden quedar fuera de la regulación el principal problema que son los accesos y salida de las ciudades hacia la segunda residencia, hacia los centros comerciales y hacia el trabajo en polígonos lejanos. Hoy es una obligación el estar repensando de forma permanente la ciudad, en caso contario el modelo sería caduco, la velocidad de los cambios nos obliga.
Tendemos a medir el éxito de las nuevas instalaciones según la afluencia de público. Así el pabellón polideportivo Jaén Arena y el Centro comercial Jaén Plaza son un éxito de asistencia, mientras el Polígono Geolit, en medio de ningún sitio, es un fracaso. Permitirme introducir una visión desde el punto de la movilidad sostenible. Cuanto más éxito tienen las instalaciones situadas en zonas periurbanas, más sonoro es el fracaso del modelo de movilidad de la ciudad. En el caso contrario está Geolit donde gracias a su fracaso, sólo obliga a unos cientos de trabajadores a realizar 40 km diarios, si le hubiera ido mejor serían miles.
Los 12 años de inactividad del tranvía han sido años donde la movilidad global ha avanzado hacia el transporte colectivo de bajas emisiones, lo que relanza la modernidad de nuestro tranvía, encerrado en cocheras por un “nunca subiré al tranvía” de quien evidentemente dejó al descubierto sus pocas luces. Su puesta en funcionamiento solventará en parte los accesos a Jaén Plaza. El polideportivo muy centrado en actos puntuales, se apoyará en buses especiales, mientras los accesos peatonales recientemente licitados, serán una opción limitada pues el tiempo excede de la conocida como barrera de los 15 minutos, sin duda el cementerio o el campo de futbol están más en su radio de acción, además será una instalación magnífica para pasear.
En fin que todo está ligado, que debemos planificar el modelo de ciudad con la suficiente flexibilidad para adaptarnos a los continuos cambios y huir de las fatídicas ocurrencias.
Salud