La famosa frase de Louis Van Gaal sintetiza muy bien a una parte de la sociedad jienense, esa que vive en la queja permanente, a la que le cuesta reconocer las cosas bien hechas. Hay quien vende que en Jaén somos gente seria, quiero pensar que pretenden decir que somos formales, cumplidores, pero muchos de ellos en realidad lo que son es unos tristes, que es algo bien distinto.
A escasos días de las elecciones municipales no es difícil ver que esa forma de pensar tiene correspondencia con las maneras de algunos partidos que se presentan en la ciudad de Jaén. Hay formaciones políticas, que cuando hablan de ellos lo hacen del presente y del futuro, de “Ahora”. No sé si porque hicieron una enmienda a la totalidad de su pasado, o bien porque carecen de él. Pero ¿se puede renegar del pasado en una ciudad donde nos conocemos todos? Cuando dicen “Ahora Jaén”, siempre me surge la pregunta: ¿y antes?
En cuanto a los que se presentan sin pasado, tal que inmaculados, pues decirle que por omisión también se escribe la historia, así no se les recuerda cuando hemos reivindicado una Sanidad y una Educación de calidad, o contra la violencia machista o por mantener los jardines en Deán Mazas, entre otras. Claro que ellos y ellas solo están por y para el Jaén del futuro y lo de la salud, educación, la lucha contra el machismo, o por una ciudad más verde, es de otra época u otro pueblo. Bienvenidos serán a la Realpolitik.
Cuando queremos buscar la colilla tirada en la calle reluciente, seguro que la encontramos, como la baldosa mal nivelada en el acerado recién terminado, o una flor mustia entre la florida pradera, a eso me refiero con lo de “siempre negativo”. Unos solo ven en Jaén el no AVE y el no COLCE y otros llegan ¡hasta Ucrania! buscando lo negativo. Impidiendo con ello un acuerdo de una lista unitaria, y todo por diferentes visiones de la guerra, como si desde el Ayuntamiento fueran a mandar tanques leopard. Teniendo el mismo objetivo, hasta coincidencia de estrategias, van y se atrancan en matices irrelevantes para nuestra ciudad. No quiero ni pensar, si se atollan ahí, que pasaría con la negociación de unos presupuestos o un PGOU...
Creo que hay que contar también con el pasado, con su mochila de errores y aciertos, por ello deseo que el camino emprendido en esta ciudad en los últimos 4 años no se trunque. Mala época ésta para los “siempre negativo”, no recordamos un subidón de autoestima colectiva como el presente, orgullosos de nuestra ciudad, de nuestro patrimonio, de la gastronomía, de la belleza de la provincia, con las calles llenas de propios y extraños…
El 28 de Mayo dejemos a los “siempre negativo” como Fonseca, triste y sola.
Salud.